Solo resisten cuatro equipos desde el 2000
De los once que corrieron ese año sobreviven Ferrari, McLaren, Williams y Sauber... y los suizos no participaron de 2006 a 2010
Los equipos pequeños dependen demasiado del respaldo comercial de sus pilotos, tanto que influyen en las decisiones. Una F-1 saludable debe hacer que los equipos modestos sean viables”, aseguraba Ross Brawn tras ser nombrado director deportivo de la F-1 por Liberty Media. Competir en el Mundial genera unos gastos astronómicos y el coste mínimo de un equipo sobrepasa los 100 millones, cerca de 300 si se aspira a conseguir podios y victorias. Con semejantes números, mantenerse en el campeonato resulta una heroicidad. Algo que también afectó a las grandes marcas por la crisis económica.
Revisando el actual siglo, llama la atención que de los once equipos que estaban en la parrilla de 2000, sólo
cuatro se mantienen en la de 2017: Ferrari, McLaren, Williams y Sauber. Eso sí, los suizos no corrieron de 2006 a 2010. Quiebras, ventas, regresos, concursos, desapariciones... conforman el resto. Los tres míticos son curiosamente, grandes beneficiados en el reparto del dinero por bonus, tanto históricos como negociados, algo esto último a lo que se unieron por resultados Mercedes y Red Bull.
Todos los elementos dan como resultado una parrilla actual compuesta por tres equipos que llevan muchos años compitiendo de forma ininterrumpidamente: Ferrari 68, McLaren 52, y Williams 39. Y el resto son menores de edad con Renault y sus 16 años, tras regresar en 2002 tras irse en 1985, como máxima veteranía. Además hay que recordar el desastre que supuso la opción de entrar a nuevos equipos en 2010. El OK lo recibieron HRT, Lotus Team (luego Caterham), USF1 (que ni compitió) y Virgin (después Marussia y por último Manor)... y en 2017 ya no queda ni rastro de ninguno de ellos.