El Celta está a un paso de hacer historia en Europa
Defienden la renta de ida para acceder a semifinales
EI techo histórico del Celta está a punto de romperse. Únicamente quedan noventa minutos para dar el último golpe, para acabar con el gafe de los cuartos de final (hasta tres veces cayeron en esa ronda) y meterse de lleno en la página más gloriosa del club vigués. Alguno puede pensar que sólo es hora y media de trámite. Está totalmente equivocado. Serán, seguramente, los noventa minutos más largos en los noventa y tres años de vida del Celta. Es cierto que los vigueses ya jugaron tres finales de Copa y lograron hazañas impensables durante su trayectoria por el viejo continente, pero este momento es único, quizás hasta irrepetible. Un título europeo está al alcance de la mano y eso son palabras mayores.
El momento es perfecto, la renta de la ida ofrece una pequeña ventaja, el equipo de gala está en plenas condiciones y la motivación es máxima. El mejor ejemplo es que los diez jugadores de campo que saltarán hoy al césped para escuchar el himno de la Europa League descansaron en Granada. Están todos concienciados, convencidos, preparados para la batalla más transcendente. Berizzo apostará por el mismo equipo de la ida, confiandalo todo al ya conocido como tridente del GAS (Guidetti, Aspas y Sisto).
Seguridad. Al Celta le basta con no encajar goles para incluir mañana su nombre en una de las bolas del sorteo de semifinales. No obstante, la debilidad de la retaguardia está siendo una constante, tal y como se pudo comprobar en el partido de ida. La concentración debe ser máxima, los despistes están prohibidos.