Quico Catalán “Es el momento de dar un salto de calidad”

El Levante ha vuelto a Primera por la puerta grande. Con una autoridad abrumadora. Pero el presidente granota no lo cambia por haberse quedado en la máxima categoría. Ahora los granotas tienen una situación inmejorable para consolidarse definitivamente en Primera.

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—Nos sobraron seis semanas y parece que ha sido todo fácil. Pero ha sido un año difícil.

—Es su segundo ascenso, pero nada comparable, ¿no?

—Diferente. Pero igual de importante. Este es el primer ascenso que desde el principio lo teníamos como objetivo. El anterior nos vino como un regalo.

—¿Le ha venido bien bajar de categoría para luego subir?

—Para nada. No hemos dejado de hacer nada que no habíamos hecho antes. El club ha seguido trabajando como Primera con el equipo en Segunda. Pasara lo que pasara iba a ver cambios. Siempre dicen que a veces es mejor dar un paso para atrás para dar diez adelante. Puede ser, pero yo no cambio el estar en Primera. Hubiera firmado jugarme el descenso en la última jornada antes de estar en Segunda. Estar en Primera es lo máximo a lo que aspiras.

—¿Cuándo ve al equipo en Primera?

—No creo que fuera un partido en concreto. No lo puedes decir públicamente, pero cuando sumamos 73 puntos, internamente, éramos conscientes de que ya estaba.

—¿Con qué momento se queda de esta temporada?

—Me quedo con el día a día. Es lo que te enorgullece. Saber que en momentos de la temporada tuvimos dos resultados negativos y se hablaba de una crisis y se siguió trabajando igual. Sin ponerse nervioso. Cuando el árbitro pita el día del Oviedo es verdad que la sensación es de euforia total pero llevaba un trabajo previo.

—¿El secreto ha sido saber amoldarse a la categoría?

—Se ha dado todo. A nivel de Liga nos hemos considerado siempre un club de Segunda. Te das cuenta que hay una cosa que es fundamental: para aspirar a Primera tienes que ser un equipo de Segunda. Si no nos hubiéramos creído eso desde el primer día, si no nos hubiera hecho daño el descenso, no habríamos llegado al objetivo. Para eso tienes que tener gente con hambre de jugar en Primera.

—¿Sirve este proyecto en Primera División?

—Creo que es más fácil que equipos de Segunda compitan en Primera que al revés. No por calidad, si no por mentalidad, por hambre, por ilusión. Siempre hay que reforzar plantillas, pero se puede competir con un bloque importante en la categoría. Porque la calidad la suples con ilusión y ganas. El año pasado pensábamos que el equipo tenía todo para salvarse y no lo conseguimos. Y ha sido cuando más dinero nos gastamos. El fútbol va en función de muchas cosas. Pero hay una cosa que vale para todas las categorías: si tú no tiras la toalla el fútbol te va a dar otra oportunidad.

—¿Qué horizonte vislumbra en los próximos años?

—Me gustaría conseguir los objetivos deportivos. Que se esté en Primera División. Y que podamos construir más club del que tenemos. Que se pueda abordar proyectos como la remodelación del estadio o la creación de esa Ciudad Deportiva que tenemos en mente. A nivel social hay un proyecto muy bonito. Es muy bonito jugar en Primera. Y es el momento de dar un salto de calidad. Hay una generación de levantinistas que no entienden que el Levante esté en Segunda porque no lo han vivido. Qué bonito. Y otra generación que ha visto más partidos en Segunda B que en Primera.

—¿Qué proyecto preparan?

—El proyecto y el objetivo te la va marcando la temporada. El cómo es muy importante para conseguir las cosas. Ojalá podamos controlar ese cómo. Dependerá de que la pelota entre pero es verdad que la situación económica ahora es muy diferente. Tenemos un escenario ideal para consolidarnos en Primera División.

—Será con Muñiz...

—Ha hecho un trabajo sensacional. Es el líder perfecto para un proyecto en Primera División. La confianza es total.

—¿Estará Roger en ese proyecto? Con la temporada que ha hecho no le faltarán novias, ¿no?

—C ua l q u i e r a que haya seguido al Levante este año habrá visto que tenemos activos muy importantes. Pero no tenemos la necesidad de vender. Llevamos dos años sin traspasar a nadie.

—¿Por Camarasa y Deyverson sí que parece que podrían hacer caja?

—Por ellos y por otros muchos. Pero la idea no es esa. Salvo que surja una opción muy interesante. Lo de Camarasa es reconducible, como todo en la vida. Unos asimilaron mejor el descenso que otro. Alguno pensó que jugar en Segunda era un palo para su carrera. Otros lo entendieron de otra forma. Y se ha demostrado que jugar en Segunda no ha de ser un descrédito. Veremos qué pasa en el mercado.

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