Sin goles no hay victorias

Sin goles no hay victorias y el Alavés sigue sin ver puerta. El problema también es que apenas goza de ocasiones a lo largo de los partidos. Ayer estuvo serio en la primera mitad pero el tanto de Luisinho

le mató y, con la fragilidad mental que tiene ahora, acabó derrumbándose. Nada nuevo en ese sentido. La verdad es que antes de encajar siempre desperdicia alguna gran ocasión: en Leganés Manu García falló un penalti, ante el Barça fue Rubén Sobrino quien erró en un cara a cara con el portero y ayer Rodrigo Ely estrelló un balón en el palo.

Cada vez que llega un técnico nuevo hay que analizar qué jugadores salen favorecidos y quiénes pagan los “platos rotos”. Javi Cabello introdujo cinco novedades: Maripán de central, Duarte de lateral zurdo, Manu y Torres de anclas en la medular y

Burgui en la media punta. Tuvieron suerte desigual a lo largo del choque. Los damnificados fueron

Alexis (muy mal arranque de temporada), Pedraza (jugaba de lateral cuando es medio punta, puesto que ocupó ayer tras el primer cambio), Wakaso (muy fogoso pero poco atinado) y Pina (viajó a A Coruña pero fue el descarte y se quedó en la grada). A Bojan no hay que meterle en esta lista porque su ausencia se debió a unas molestias en los isquios que aconsejaron que no entrara en la convocatoria.