Carreño roza la hazaña, pero Thiem le deja sin semifinales
El español debutó por Nadal y estuvo a punto de remontar
En su debut en el Masters, Pablo Carreño —15º español que lo juega— estuvo cerca de ganar a Dominic Thiem, pero su arrojo no fue suficiente para superar a un tenista más rodado, que al verse al borde de la eliminación tiró de clase para continuar vivo: 6-3, 3-6 y 6-4 en dos horas y seis minutos.
Carreño, que sustituía a Rafa Nadal en el Grupo Sampras, respondió mucho mejor de lo que algunos auguraban, dio una imagen más que digna teniendo en cuenta que tuvo que mentalizarse en muy poco tiempo para disputar una competición que reúne a los mejores del año. Desgraciadamente ya no tiene opciones de pasar a las semifinales. Dimitrov ya está clasificado como primero tras barrer a Goffin por 6-0 y 6-2 y la otra plaza será para el belga o para Thiem, que se la jugarán en duelo directo mañana.
Carreño empezó abrumado por una cancha inmensa, casi llena y oscura (“se veía todo muy grande”, dijo). Nadie puede negarle que se jugó con mucho riesgo cada golpe. Pero en ocasiones le faltó la precisión que sí tuvo Thiem. La diferencia, 14-7 en errores no forzados. Así rompió el saque del español en el quinto juego y cerró el parcial con otro break en el noveno.
Libre ya de nervios, Carreño se soltó. Con 3-1 a favor, salvó tres bolas de rotura y aguantó hasta el final para terminar quebrando el saque de Thiem con tres restos ganadores. Dándole la vuelta a la cuenta de fallos (8-14), igualó. Faltaba rematar la proeza, pero su rival se adelantó en el tercer set y la victoria se puso cara. Carreño peleó y se metió al público en el bolsillo por su bravura. A remolque, terminó claudicando. “Pasar a semifinales no era un objetivo real, pero quería demostrarme a mí mismo por qué estoy aquí y que puedo jugar a este nivel”, dijo al final el asturiano.
Orgulloso
“Quería demostrarme a mí mismo por qué estoy aquí”