El Sevilla de Montella ya encuentra su identidad
El triunfo en el Wanda aparca la crisis de juego en Nervión
El Sevilla no sólo dio en el Wanda Metropolitano un paso de gigante para poder clasificarse a las semifinales de la Copa del Rey sino que esbozó las primeras pinceladas de su reconstrucción tras una crisis que pudo con Eduardo Berizzo y que alejó de momento al equipo de los objetivos marcados. Vincenzo Montella varió las piezas de su once y, sobre todo, encontró al fin el gen competitivo que parecía haber perdido el cuadro sevillista en los últimos encuentros.
El espíritu mostrado ante el Atlético de Madrid pretende instalarse como base de un nuevo periplo con Montella a los mandos. El Sevilla recuperó la presión en todo el campo, la intensidad en las marcas y el carácter combativo que parecía haberse esfumado en su último mes de competición, todo ello unido al gran enfado de la afición sevillista, que demandó más exigencia y esfuerzo al plantel. La conquista del Wanda se tradujo también en la introducción de variantes que mejoraron el nivel táctico del equipo: una de ellas fue el cambio de cromos en los extremos, con Correa y Sarabia dejando más físico y capacidad defensiva. La cercanía entre las diferentes líneas fue más real que en las primeras citas de Montella. El italiano comienza a dibujar sus intenciones y también a conocer sus piezas a la espera de que el club le entregue algunas más. Una de las gratas noticias fue Correa, que reclamó más protagonismo en los planes de este renacido Sevilla. Suma cuatro goles en Copa, siendo el segundo máximo anotador de la competición, y se erige en protagonista pese a que aún no encuentra regularidad en su juego. En Liga sólo jugó 507 minutos. N’Zonzi. Montella devolvió la titularidad a Steven N’Zonzi en pleno debate sobre su futuro y su rendimiento en esta primera fase de la temporada.
El francés, sin un pivote a su lado, mostró más solvencia y protagonismo que cuando el sistema incluye más piezas defensivas en su once inicial. Montella sabe que se trata de una pieza fundamental en su esquema y pretende normalizar la situación para que el jugador recupere su mejor versión de juego.
El italiano amaga con su primera sonrisa desde que llegó a Sevilla y espera poder dar continuidad a la mejoría de juego de su equipo en Liga ante el Espanyol este mismo fin de semana.
Variaciones Los cambios en el once dieron más equilibrio e intensidad a su equipo