Marcelo se apunta a París
Tuvo 28’ y ni rastro de su lesión Zidane dio pistas: Asensio, Kovacic y Lucas Vázquez ‘huelen’ a titulares ante el PSG...
EI Madrid llega al solomillo de la temporada y Marcelo se sienta a la mesa. París es el Rubicón del equipo blanco, si lo atraviesa no hay marcha atrás. La Decimotercera o temporada para olvidar. Un momento clave para el que el brasileño, que le marcó al PSG en el 3-1 del Bernabéu, ha protagonizado casi una recuperación exprés. Mientras Kroos y Modric no terminan de recibir el alta médica, Marcelo sí tuvo 28 minutos contra el Getafe sin signo alguno de venir de una lesión. Vertical y explosivo, como si el problema muscular que le hizo perderse los partidos contra el Leganés, Alavés y Espanyol nunca hubiera existido...
Tan despreocupado estaba Marcelo, que en la primera parte contra el equipo azulón se aposentó en el banquillo en zapatillas de deporte, moda que parece haber popularizado Bale. Tenía pactada con Zidane su participación, limitada, en el tramo final. No llegó a la media hora, en la que no se limitó a recuperar tono físico y sensaciones. Ensayó cómo si fuera la Champions. Metió cuatro centros (uno de ellos convertido por Cristiano en el 3-1) y sobre todo miedo en la zaga getafense. En el minuto 92 le hizo un regate casi de fútbol sala a Damián que fue un aviso para su amigo Dani Alves. Lo resumió Michael Robinson en Movistar+Partidazo: “Marcelo encendió el Bernabéu”.
Estilete. El 12 blanco siempre tiene un efecto revitalizante en el Madrid. Su función como delantero casi encubierto cuando sube al ataque (31 goles y 82 asistencias como madridista) agita la coctelera y el resto se unen a la fiesta. Esta temporada ha disparado (28) más que jugadores teóricamente más cercanos al área como Modric (23) y más del doble que Carvajal (13). Casi vive en el área enemiga: el tres brasileño ha dado el triple de pases en campo ajeno (1.133) que en el propio (491)...
Marcelo está para París en una noche donde se pudieron despejar otras incógnitas. Una la resolvió el propio Bale, al que ni se le alteró el pulso cuando hizo el 1-0. Celebró poco el gol. El camino de migas de pan hasta el Parque de los Príncipes le indica que será suplente. Todo lo contrario que Kovacic, reservado por Zizou, y Asensio, que sí salió 14 minutos. Al francés sólo le faltó, por no haber cambios, dar paso a Lucas Vázquez. Pero dejó ver otro indicio. Mientras el coliseo blanco se vaciaba, el extremo gallego se entrenó en solitario junto a un preparador sobre el mismo césped del Bernabéu. El Madrid ya planifica la Misión París.