Reyes acerca un poco más al Madrid al factor cancha
Triunfo ante el Zalgiris ● Estrella Roja y Bamberg, los últimos rivales
El Real Madrid defenderá con uñas y dientes la cuarta plaza en las dos jornadas que le quedan (Estrella Roja y Bamberg). El Panathinaikos no falló e iguala los 17 triunfos del equipo blanco, a falta de lo que haga hoy el Khimki ante el CSKA (Movistar+ Dial 69).
E l Madrid logró un éxito decisivo ante el equipo de moda en la Euroliga. Una victoria que no le garantiza el factor cancha, pero que le aúpa en la cuarta plaza, que defenderá ahora con uñas y dientes en Belgrado y ante el Bamberg. De haber perdido, hubiera visto escapar gran parte de sus opciones por la gatera, también las de estar en Belgrado. Porque solo en tres de las últimas 20 eliminatorias de playoff un equipo sin ventaja de pista pasó a la Final Four. El gran objetivo blanco, también el de Llull.
No fue el menorquín, claro, sino Reyes quien espoleó al Madrid. Sobrecogedor: 16 puntos (6 de 7 de dos) y 21 de valoración en… 12:33. “¿Otra vez tú?”, debió preguntarse Jasikevicius, que bramaba en el banquillo. En 2013, vestido de corto con el Barça, el lituano vio como le ganaba la Liga. El cordobés fue el MVP. Cinco años después, ahí sigue Reyes. Tres canastas seguidas del capitán para lanzar al Real en el último cuarto. Un latigazo vital antes de que Laso apostara por un quinteto de cuatro bajitos y Thompkins para rematar una faena ajustada en el marcador, pero pletórica en la valoración: 121-73. Jankunas sumaba de manera compulsiva, pero se quedó aislado. El Zalgiris perdió su esencia y muchas de sus conexiones. No llegó a buen puerto frente a un Madrid que metió el 68% de los tiros de dos y repartió 27 asistencias.
El inicio dejó intuir una cosa y acabó enseñando otra. Vislumbramos un Madrid férreo atrás y luego nos dimos de lleno con su versión encajadora. La que recibió 28 tantos en el segundo cuarto, incluidos cuatro triples seguidos. El Zalgiris amagaba con pegar dentro y encontraba al tirador. Esa racha demolió la renta local, que llegó a ser de ocho (32-24) tras cuatro minutos fantásticos de Reyes: 8 puntos y 13 de valoración.
Doncic volvió y se aplicó atrás al final. Más decisivo resultó Causeur. Sacó del atolladero a los suyos: diez puntos en el tercer cuarto para neutralizar el 41-48. Pero si el Madrid venció fue porque supo lastrar la movilidad del Zalgiris. Cerró su aro y se impulsó con los gemelos de Reyes. Qué grande.