Aicardo tumbó al Jaén y el Barça rompió su sequía
Los azulgrana conquistaron su quinta Copa en la prórroga
U n título que vale su peso en oro, que espanta fantasmas y que refuerza el proyecto de este Barça. Todo eso logró Aicardo con su gol en la segunda parte de la prórroga de la final de la Copa del Rey. Un tanto que permite al club azulgrana volver a levantar un título. Enfrente, un Jaén que volvió a pelear hasta el final, que se apoyó en su ‘marea amarilla’... pero que esta vez se quedó sin milagro. Para el Barça significa mucho más que añadir un trofeo a sus vitrinas. Rompe la sequía que asolaba al equipo azulgrana en los últimos cuatro años y que pesaba como una losa.
Ese hambre la usó para salir a la final avasallando. Tomó la iniciativa, sacando partido a sus pívots. Así llegó el primer tanto, con un balón que Ferrao recibió de espaldas y lo convirtió en obra de arte. Golpe duro para un Jaén que apenas veía venir los golpes en el tramo inicial. Esquerdinha hizo el segundo y Dani Rodríguez, técnico andaluz, pedía tiempo muerto. Apenas había comenzado el encuentro y se le iba la final.
“¡Tranquilos! ¡Hay que dar un paso a delante!”, gritaba con la voz rota el entrenador jiennense, que volvió a demostrar cómo sus jugadores le siguen con fe ciega. Dicho y hecho. Subieron la presión, frenaron la salida en tromba del Barça... y Burrito acortó distancias. Reacción. El Barça vio las orejas al lobo y sacó a sus dos pívots a la vez, Ferrao y Esquerdinha, para cambiar de nuevo la inercia. Le funcionó en parte, ya que Santana hizo el 3-1. Pero el Jaén, el campeón de la histórica Copa de España de Madrid, ya había encontrado su sitio. Alan Brandy, a pase de Campoy, y Dani Martín, como colofón a una gran jugada, habían puesto el empate antes del descanso. Y aún pudo irse por delante el equipo andaluz si Chino hubiese acertado con un doble penalti. Pero el meta Sedano, inseguro hasta ese momento, se resarció a lo grande. Tras la reanudación, se atacó a tal ritmo que cada ocasión tenía el riesgo de ser sorprendido a la contra. En esos minutos eléctricos, el Jaén pudo llevarse el título, pero Carlitos y Boyis chocaron con los postes. Ya en la prórroga, fue el tiempo del gaditano Aicardo. El héroe era andaluz, pero vestía de azulgrana, y su zurdazo significó mucho más que ganar una Copa. El Barça se quita un peso de cuatro años sin títulos. Y sin ese lastre sabe que es mucho más fácil volver a la cima.
Significado El Barça se quita una losa de cuatro años
sin ganar ningún título