En Croacia se impone este verano la ‘Modricmanía’

■ El parón estival me ha traído unos días con la familia por la coqueta tierra de Luka Modric. El mar Adriático fue la semilla donde creció el talento del genio croata. Nació en Zadar hace casi 33 años y por aquí lo tienen muy presente. A 159 kilómetros, en Split, las calles se derriten entre el calor mediterráneo y la legión de turistas que visitan estos días la cuna de los flamantes subcampeones del mundo. Aquí en los numerosos cafés de la urbe y en los restaurantes todo el mundo habla de fútbol. Lógico. La resaca feliz del Mundial de Rusia sigue presente. Pero como madridista, lo que más me ha llenado de orgullo es que el 90 por ciento de la población futbolera sólo rinde culto a Modric.

Les aseguro que de cada diez personas con las que me he cruzado y que llevan una camiseta de fútbol, nueve lucen con el 10 y el nombre de Modric a la espalda. De esas nueve, entre seis y siete son de Croacia y el resto del Real Madrid. No busquen camisetas de Messi ni de Cristiano. No las verán. Aquí reina la Modricmanía. Si acaso, queda algún hueco para alguna camiseta de Mandzukic, Perisic o Rakitic. Da gusto cuando te identifican como ciudadano español y lo primero que te dicen, con una sonrisa de oreja a oreja, es: “¡Tú también serás fan de Luka Modric!”. Pues sí, y a mucha honra. Luka, orgullo del Madrid y de Croacia...—TOMÁS