Alcaraz otorga la tercera victoria seguida al Pucela
El Huesca decidirá hoy sobre la continuidad de Leo Franco
EI Real Valladolid vuela, sueña y se va al parón en las mejores condiciones posibles tras tres victorias consecutivas y muy buenas sensaciones después de derrotar ayer al Huesca (1-0) con golazo de falta de Rubén Alcaraz. El mediocentro pucelano no sólo es el jugador que más balones roba o el que más faltas recibe de la Liga. Es que además, manda, ordena y ejerce de líder. El conjunto oscense, por su parte, está en problemas y su técnico, Leo Franco, más. El club aragonés tomará hoy una decisión sobre su continuidad. Los síntomas no son buenos. Ayer en la primera parte renunció a atacar, dejando en el banquillo a Cucho y Gallar, mientras que Melero estaba en el palco por molestias. Intentaba el argentino cerrar la hemorragia de goles recibidos, pero no contaba con Alcaraz (27’). Ya llevan 18 en contra.
Tampoco en la segunda parte, de inicio, tuvo intención de cambiar esa dinámica. Sólo el gol de Leo Suárez (50’), anulado más de un minuto después y con el balón ya rodando (escándalo), hizo reaccionar al aún entrenador del Huesca, que introdujo en el campo toda su dinamita: Cucho, Gallar y Longo. Al menos así las ocasiones se repartieron en las dos áreas, cosa que no pasaba hasta entonces. Llegó el Huesca vivo al final por Cop, que no tuvo su día, empiezan a ser demasiados, y porque el Valladolid quiso proteger su botín demasiado cerca de Masip. Los de Franco pudieron anotar en un cabezazo de Gallar y en un remate de Semedo, que se fue arriba, pero no lo hicieron. El Valladolid vuela, el Huesca, no.