Sergio Llull “Lo de la NBA sigue ahí, no cierro la puerta”
Sergio Llull (31 años, Mahón) cumple este verano una década con la Selección. Llegó como un becario a la concentración de San Fernando en 2009 y se metió en el Eurobasket de Polonia. Desde entonces, el base balear no se ha movido de ahí.
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En 2009 llegó a la concentración de meritorio y pasó por encima de Saúl Blanco, favorito para ir a Polonia. Para la gente que pelea ahora por una plaza, ¿cuál es su consejo?
—Que disfruten de la experiencia, que se esfuercen al máximo. Cuando uno es rookie, por decirlo de alguna manera, tiene que aprender de los que más tiempo llevan. De 2009, recuerdo que en los entrenamientos iba al 200 por ciento y luego aprendí de grandes como Raúl López, Marc, Pau, Felipe, Rudy...
—Ya no se bajó de este grupo de leyenda. El día 14 cumple diez años. ¿Cómo ha sido el viaje?
—Espectacular. Estoy agradecido a Sergio (Scariolo) por darme la oportunidad de entrar en el equipo. Han sido diez años magníficos, espero que sean más.
—Ha sido un año irregular para usted. ¿Le ha venido bien parar, en qué punto está?
—Estoy bien. Contento de estar con la Selección: para mí es un privilegio. Estoy muy orgulloso y tras la lesión de hace dos años, con ganas e ilusión.
—En este Mundial no estarán Pau ni Sergio Rodríguez. Lo quiera o no va a tener que asumir un rol más protagonista.
—-Estoy a disposición del seleccionador para lo que pida. Los que llevamos más tiempo aquí intentamos tirar del carro, pero todos tenemos que poner nuestro granito de arena.
—¿Se echa de menos a los que no están?
—Sí, hombre, por supuesto. Gente como Pau, Navarro y Felipe son referentes para nosotros, que somos más jóvenes y cuando deciden no venir o están lesionados, pues se les echa de menos. Pero nos tenemos que centrar en los que estamos y luchar por las medallas.
—Gente como Navarro en su día o Mirotic ahora han probado en la NBA y han vuelto. ¿Eso, en cierto modo, le da la razón por haber seguido en un equipo ganador como el Madrid y no dando tumbos por la Liga norteamericana?
—No me tiene que dar la razón nadie. Eso son decisiones personales, que tomé en su momento y lo de la NBA sigue ahí. Es una puerta que nunca puedes cerrar. Pero soy feliz en el Madrid y es donde quiero estar.
—No damos por cerrada, pues, esa puerta.
—-No, no, no. De hecho, agradezco el interés que tiene Houston todos los años y que respeten también mi decisión porque en ningún momento han puesto ningún tipo de presión.
—Se van a cumplir dos años de la grave lesión de Tenerife. Cuando a alguien le pasa algo así, ¿se plantea con más precaución los partidos de preparación?
—Si piensas así, es probable que no te salga bien. Yo estoy recuperado físicamente al cien por cien. Ya al final de la Liga me encontré muy bien y en estos partidos lo que hay que coger de nuevo es ritmo de competición.
—Una de sus imágenes más vistas en el Madrid es ese Llull líder que enciende el Palacio, que es el alma del equipo. ¿Le falta ese punto de liderazgo con la Selección?
—Yo estoy contento con el trabajo que he hecho siempre con la Selección. Al final, tienes que saber diferenciar el papel de tu equipo y el de la Selección. Con España me ha tocado un papel más defensivo porque cuando estaba Juan Carlos, mi rol era estar más intenso atrás y aprovechar mis momentos en ataque. —El problema con las Ventanas, la decisión de estrellas en varias selecciones de no acudir al Mundial... ¿La FIBA debe replantearse este escenario? —-Lo que creo es que todas las competiciones deben ponerse de acuerdo por el bien de los jugadores y del baloncesto. Tener unas Ventanas a las que no pueden acudir los mejores porque juegan en la NBA o en la Euroliga es un sinsentido. A mí me gusta ir con la Selección pero obviamente el Madrid es el club que me paga. Si el mismo día tengo un partido con mi equipo y otro con España, es obvio que acudiré con el primero.
—-Eso con respecto a la FIBA, pero en la Euroliga, si el año que viene quieren ser campeones, van a tener que jugar 41 partidos. ¿No es excesivo también?
—-Sí. Al final juntándolo todo nos podemos ir a más de 100. Todas las competiciones deben ponerse de acuerdo para cuidar más a los jugadores.
Diez años
“Esta década con la Selección
ha sido magnífica”
Conflicto “Me gusta ir con España, pero el que me paga es el Madrid”