De Jong se doctora y toma el mando del equipo

Neto se fracturó ayer el escafoides y regresa lesionado

Este es el análisis individual de una pretemporada que empezó con derrota ante el Chelsea en Japón y acabó con goleada al Nápoles en Detroit.

Ter Stegen. Ha estado en un segundo plano. Ha hecho una preparación sobria.

Neto. Gran partido en Miami, pero regresa lesionado para cinco semanas por fractura de escafoides.

Semedo. Preparado para el desafío de ser indiscutible. Físicamente impecable.

Wague. Muy verde. El Barça no da dos oportunidades.

Piqué. Con experiencia como para saber cuándo vendrá lo importante. Un año más, van once, indiscutible.

Todibo. Físico privilegiado y personalidad para salir con el balón jugado. Le queda ganar pausa.

Umtiti. Una incógnita. Sus malos minutos contra el Nápoles permiten dudar de su rendimiento.

Lenglet. Jugador centrado y formal que cumple. Ha empezado aplicado. Su reto es dar un paso más.

Jordi Alba. No se va a inquietar con la llegada de Junior. Es indiscutible para Valverde.

Junior. Tendrá pesadillas con su debut, pero es que el partido era una trampa. Físicamente soberbio.

Busquets. Una pretemporada extraña: gol, fallo y la competencia de De Jong. Debate.

Rakitic. Sin tener su continuidad clara y con el cartel de transferible, fue uno de

los futbolistas más importantes.

Sergi Roberto. Vuelve a ser centrocampista. Para el jugador, el desafío es gigante.

Aleñá. Culmina la gira de menos a más. Un jugador necesario en el vestuario, que transmite barcelonismo.

Riqui Puig. Generador de debates entre los que le ven especie en extinción y los que le ven sobrevalorado.

Arthur. Ha jugado sólo 25 minutos. Necesita dar el salto para ser el futbolista que el Barça vendió cuando lo compró del Gremio.

Rafinha. Pretemporada más que correcta. Termina contrato en 2020 y se tendrá que sacar lo que se pueda.

Vidal. No está garantizado que siga. Uno de los afectados junto a Rakitic por la apurada economía.

Coutinho. Llegó a tiempo para jugar unos minutos. En el vestuario no será un problema. En venta.

Dembélé. Devastador con espacios, imprevisible en su toma de decisiones. Puede ilusionar, emocionar y desquiciar a la vez.

Griezmann. Mirando más por el equipo que por él. Con pocas ínfulas de estrella... necesitaba marcar.

Suárez. Ha llegado con las pilas puestas. Tres goles y trabajo descomunal.

Carles Pérez. Sus dos goles ante el Vissel Kobe le han dado la posibilidad de tener opciones de ganarse un sitio en la primera plantilla.

Abel Ruiz. Se movió bien en lo poco que jugó. Cerca del gol. Futuro en el aire.