Madrazo se puso “cabezón” para llevar al cielo al Burgos
El equipo inició 2019 sancionado y ayer hizo doblete
El grito de alegría de Ángel Madrazo tras cruzar la línea de meta se escuchó sobre toda la algarabía de la llegada. “¡Increíble! ¡Esto es la hos...!”, decía visiblemente emocionado. Sus compañeros del Burgos-BH (Bol acabó segundo) hacían piña entre abrazos a pie de podio. Al fin, tras estar presentes en todas las escapadas de la Vuelta y vestir el maillot de la Montaña con el propio Madrazo para “dejarse ver en televisión”, como actores secundarios, al cántabro de 31 años le tocó ser protagonista de la victoria de su vida y del triunfo más importante de la formación.
La rueda de prensa como ganador fue emotiva y divertida a partes iguales, arrancando continuamente las carcajadas de los presentes por la extrema naturalidad con la que contó sus sensaciones. “No me lo voy a creer hasta que no lo mire en Procyclingstats”, afirmó en referencia a la web de estadísticas. Padre
de dos niños, le apodan El Gorrión de Cazoña debido a que su padre, que también hizo sus pinitos en el ciclismo, era conocido como El Águila de este barrio de Santander. Para Madrazo, es la tercera victoria de una carrera en la que quiso resaltar el importante papel de su mujer: “Ella es la que hace que no me rinda, es clave en este éxito, a pesar de que somos diferentes. A ella no le gusta el deporte y sí leer. Yo soy de videojuegos, a ver si después de esto me compra la Play 4”, explicó con gracia.
Del mánager, Julio Andrés Izquierdo, imaginó que andaría “rezando en una ermita” por la importancia del triunfo para un equipo pequeño que arrancó 2019 suspendido por sus tres casos de dopaje en un año (de Belda, Merino y Salas; Madrazo estaba en el Delko), y que, meses después, se ve ganando en una grande, con lo que eso supone para su continuidad... y con el horizonte en un 2021 en el que la Vuelta arrancará en Burgos. Y eso que ni los propios directores creyeron en su hazaña: “Todo ocurrió gracias a intentar defender el maillot de la Montaña. Desde el coche me dijeron que guardara cuando me descolgué de la fuga, pero me puse cabezón y llegué arriba con ellos. Arranqué en realidad para ganar la Montaña, y cuando vi que no me seguían, continué para arriba”. Hasta llevar al Burgos al cielo.