Australia, rival de la Selección en semifinales
Los ‘boomers’ vencieron a los checos en cuartos Mills, destacado
España y Australia volarán este jueves a Pekín. No hay cuentas personales pendientes entre ellos, pero sí cuando discuten acerca del sobrepeso de metal. A los boomers todavía les escuece la derrota (8889) en el partido por el bronce de los Juegos de Río. Pero más allá de eso, Australia está luchando por la primera medalla de su historia en un Mundial. Su mejor resultado en estos campeonatos es un quinto puesto en 1982, marca que superarán tras haber doblegado ayer a la República Checa. Tras hacer un Eurobasket flojísimo en 2017 y confirmarse la baja de Vesely, nadie esperaba nada de un equipo que se metió en cuartos jugando bien sus bazas con dos victorias estratégicas contra Turquía y Brasil que le han llevado a una instancia que está por encima de su baloncesto.
Contra Australia compitió hasta que pudo, unos 25 minutos. Luego intentó sostenerse, pero no tenía capital humano para más. Los aussies sí lo tienen, aunque veterano. Mills, nacido en 1988, es una ametralladora; Bogut, en 1984, un pívot al estilo Marc que sabe leer el baloncesto; Ingles (1987) conoce los secretos FIBA y NBA; el durísimo Baynes (1986), algo así como un Felipe a la australiana. La veteranía de sus jugadores ayudó a templar emociones y abrochar un triunfo que se celebra como algo histórico en el país.
Los oceánicos lucharán por su primera medalla en un Mundial