“Hay que salir de España para crecer en el hockey”
Sara Molina, la primera española sobre hielo en la NCAA
Una chica madrileña recién salida del instituto jugando al hockey hielo en Estados Unidos. Esa es Sara Molina (19 años), la primera española que debutará en ese deporte en la NCAA, asociación que aglutina las competiciones deportivas universitarias del país.
Terminados sus estudios de secundaria en el Banff College de Canadá, ahora compaginará una carrera de Gestión Deportiva con el equipo de la Universidad de Castleton. “En mi cabeza siempre ha estado jugar en Canadá o Estados Unidos, era mi sueño”, cuenta.
Y lo cumplirá en un pequeño pueblo del verde y montañoso estado de Vermont. Allí llegó “a través de una agencia de representación”. De esas que no paran de exportar talento nacional a Norteamérica. “Es un sitio muy bonito. Les mandé un e-mail y al día siguiente me dijeron que querían que fuera. Me pareció que era un buen ambiente, así que decidí quedarme”, relata Sara, que cree que es “fundamental” salir de España “para crecer en el hockey hielo”.
De su padre, Moisés Molina, nacido en Canadá y especialista en deportes norteamericanos de Movistar Plus, heredó muy pronto la pasión por el hockey y con él aprendió a patinar en Majadahonda. Después pasaría por el equipo majariego y Boadilla. De esa etapa se queda con “jugar por diversión, por los viajes…”.
Un espíritu totalmente distinto al ambiente hipercompetitivo en el que vivirá a partir de ahora. Porque el hockey hielo que se practica al otro lado del Atlántico es casi un deporte distinto comparado con el español: “La pista es más estrecha y el ritmo, más alto, y se nota el cambio de tamaño. Hay gente muy grande y fuerte, y el contacto es más duro”.
De su primer año en Castleton, Sara espera crecer “como deportista y persona”. Si no consigue llegar alto, le gustaría “ayudar a niños en España y de fuera a descubrir el hockey”, porque cree que a este deporte “le falta promoción, equipos y jugadoras”. Si despunta, confiesa que le tira más “representar a Canadá (tiene la nacionalidad) que a España (con la que ya ha estado en categorías inferiores)”, aunque lo ve “casi imposible”. Pase lo que pase, estará “siempre ligada al hockey”.
Cambios
El ritmo es “más alto” y los contactos “más duros” en su
nuevo destino