Mas gana en la prórroga
El español no se marchará de vacío esta temporada tras su triunfo en el Tour de Guangxi
Enric Mas se estrenó en 2019 con un triunfo de etapa en Guangxi, la última cita del World Tour y su despedida con el Deceuninck antes de marcharse al Movistar en 2020.
Tras la irrupción en 2018 con el segundo puesto en la Vuelta y su triunfo en la etapa reina (además de otra victoria en País Vasco), había unas expectativas altísimas sobre lo que podía hacer Enric Mas esta temporada. Ha sido la de su estreno en el Tour de Francia, la de figurar entre los favoritos de toda aquella prueba en la que compitiese... Sin embargo, el joven corredor de 24 años, llamado a ser el líder del ciclismo español del futuro, no ha deslumbrado como en la anterior campaña. “Necesito victorias”, se había sincerado, y su objetivo lo logró ayer en la cuarta etapa del Tour de Guangxi en China, la última cita del calendario World Tour.
También significa su última carrera con el maillot del Deceuninck antes de marcharse el próximo año al Movistar y se había propuesto que su adiós fuera con honores. La escuadra belga le apoyó en una jornada como la de ayer, que parecía la más propicia para que el de Artá mostrase su talento, con un final en la subida a Nongla. Su compañero Remy Cavagna atacó para medir las fuerzas y, una vez cazado, saltó Enric Mas con Daniel Felipe Martínez a su rueda, pero el colombiano acabó cediendo ante el empuje del escalador español.
“Es genial poder despedirme así de este fantástico equipo al que siempre le estaré agradecido”, aseguró en meta el español, que entre hoy y mañana aún tendrá el objetivo de defender el liderato y llevarse una carrera en la que nunca había ganado un español (es la segunda edición). Sería su primera general de una carrera por etapas.
Movistar. Un objetivo para cerrar una etapa, la de joven promesa en un equipo extranjero sin demasiado interés en las generales, antes de iniciar otra como jefe de filas del Movistar, el único equipo español World Tour con una exigencia máxima en las carreras de tres semanas. Él mismo, tras su debut en el Tour en este 2019 (22º en la general y tercer mejor joven), tiene claro que necesitaba una escuadra que le arrope si de verdad quiere brillar en las grandes vueltas. Lo hará en una estructura ansiosa de que pueda cubrir el enorme hueco dejan las marchas de Nairo, Landa y Carapaz. Y con todos los focos apuntándole.
Satisfecho “Es genial despedirme así del Deceuninck”, aseguró el español