Santolino se va con un brazo roto: “Lástima”
El salmantino iba 14º cuando, antes de llegar a meta, no vio bien una duna y se fisuró el radio
“Se ha acabado el Dakar para mí. Por suerte no me he caído ni nada, ha sido una compresión fuerte, he notado dolor y he tenido que parar”. Eso era lo primero que dijo Lorenzo Santolino al llegar al vivac de Haradh tras verse obligado a abandonar cuando le faltaba sólo el último tramo para completar una especial en la que se mostró como suele, constante y regular, o mejor, porque rodaba 14º con la Sherco a menos de ocho minutos de Quintanilla.
Pero una duna que no alcanzó a ver adecuadamente se entrometió en su camino haciendo que el Dakar se terminase antes de tiempo para él: “Iba a un ritmo normal, me encontraba a gusto y en una duna en la que había un pequeño cambio de rasante no he visto que hacía un poco de bajada, de unos dos metros y tenía un bache al final. Iba a 60 km/h, pero al caer de la duna he entrado ya comprimido al bache y al hacer tope con la horquilla se me ha roto el brazo”.
“Parece que el radio tiene alguna fisura y tenía una subluxación que me colocaron en el centro médico del vivac”, dice el salmantino sobre el parte inicial de lesiones, pero tendrá que conocerlas más detalladamente lo antes posible, por eso iba a coger el primer vuelo en Riad con destino a Madrid: “Llego mañana (por hoy) a Madrid y directamente iré a un hospital por decidir para hacer un examen más preciso”.
Abandonar es duro, y más cuando peleaba por el Top 15 penalizado por un cambio de motor, pero se lo toma con filosofía: “Una lástima, pero no me siento mal porque no sentía que fuera al límite. Había encontrado un buen ritmo, sin sustos y siendo muy prudente en las zonas peligrosas. He tenido saltos más grandes y compresiones más fuertes y no ha pasado nada. Por suerte no es nada más que el brazo”.
Incidente “No me he caído ni nada, ha sido una compresión fuerte”