Pandemia Libertad con caut
El 70% de la población está en Fase 3, pero los gobiernos autonómicos no abren el tránsito entre provincias ni activan el ocio nocturno
Algo más del 70 por ciento de la población que hay en España vive desde ayer en Fase 3, con el levantamientro de medidas restrictivas que alivian el día a día y les acercan a la normalidad. Sin embargo, es libertad de ha sido recibida con mucha cautela, tanto por parte de los gobiernos autonómicos como de los ciudadanos, que temen un nuevo rebrote de coronavirus. Muchos de las comunidades autónomas que pedían pisar el acelerador han echado el freno y los miedos a los contagios y los rebrotes limitan la movilidad a las provincias dentro de una misma comunidad, pese a que todas las que están en la última fase podían haber negociado el tránsito entre ellas.
Los planes que tenían algunas comunidades para permitir por ejemplo un corredor cantábrico para transitar desde Navarra a Galicia se han frenado tras un brote en el País Vasco. Cantabria ya dijo que no permitirá el tránsito y así lo está cumpliendo.
La mayoría de Gobiernos autonómicos no quieren precipitarse y han anunciado que esperarán a que toda España llegue a la denominada nueva normalidad. Alberto Núñez Feijóo, presidente de Galicia, la única que salió ayer del estado de alarma, pedía el sábado incluso “una norma de salud pública que permita prohibir la movilidad de territorios en situación de pandemia si el número de contagios es elevado”.
Ocio nocturno.
Las distintas velocidades que cada comunidad ha adoptado en una Fase 3 asimétrica se reflejan sobre todo en el ocio nocturno, uno de los puntos controvertidos de la última fase antes de la denominada nueva normalidad. El Gobierno se limita a proponer un marco, que en este aspecto consiste en abrir estos locales a un tercio de su aforo habitual sin que se usen las pistas de baile. Galicia, Canarias, Andalucía, Asturias, Baleares, Castilla y León, Murcia, Navarra y Euskadi han decidido posponer la apertura de bares de copas y discotecas por considerar que se pueden convertir en un foco de transmisión. No quieren que les suceda como a Corea, donde un brote en discotecas en mayo obligó a adoptar nuevas medidas restrictivas y retrasar la apertura de colegios. Han tomado esta decisión ante una generalizada protesta del sector, que siente las medidas como una discriminación, mientras ya se puede entrar a cafeterías y restaurantes.
El resto de comunidades en Fase 3 sí
Nueve comunidades posponen la apertura de discotecas y bares de copas por temor a ser un foco de contagio
permitirá el ocio nocturno con las restricciones que propone el Gobierno, excepto Extremadura, que aunque en la primera semana de esta última fase decidió mantener cerradas las discotecas y seguir prohibiendo la movilidad entre sus provincias, desde ayer permite a sus ciudadanos moverse entre Cáceres y Badajoz, además de abrir los locales nocturnos no a un tercio, sino a un 50% de su capacidad.
Todo esto y las restricciones que quedan para los siete territorios en Fase 2 durarán menos de una semana. Desde el 21 de junio regirá el decreto de la nueva normalidad, pero las comunidades seguirán con la última palabra para muchos asuntos, como por ejemplo el aforo de los espacios.
Extremadura es una excepción: permite a sus ciudadanos moverse entre Cáceres y Badajoz y ha abierto discotecas