Nuevo confinamiento
Asturias se encierra para ver el gran duelo regional
EI gran duelo del fútbol asturiano llega esta noche a El Molinón-Quini en el formato más atípico de su historia. Sin público y a última hora de un día laborable, Sporting y Oviedo se miden en el estadio gijonés con objetivos bien distintos y en dinámicas muy diferentes; la de los rojiblancos es ascendente, en busca de los puestos de playoff, mientras que los azules han vuelto a caer a la zona de descenso y tienen la urgencia de escapar cuanto antes de este lugar de máximo peligro.
A la vista de los resultados de las dos primeras jornadas tras el confinamiento, el Sporting es favorito. Pero esto es un derbi y puede pasar de todo. Más aún cuando la presión ambiental será inexistente. Y, si sirve el dato, de los 29 partidos disputados en Segunda en estas primeras tres jornadas tras el parón (hasta el momento de cerrar estas líneas), sólo seis acabaron con victoria local, por
13 con victoria del equipo visitante.
Djukic apuró hasta última hora de ayer la preparación del partido. La sesión permitió comprobar que Pedro Díaz ha podido entrar en la convocatoria de la que se ha caído Hernán Santana, lesionado. No se esperan grandes cambios en el once sportinguista, que viene funcionando a satisfacción del técnico.
Por su parte, el equipo de Ziganda llega al derbi con un punto extra de presión tras haber malgastado dos balas en su campo (ante Ponfe y Depor) con dos puntos sumados de seis en juego.
Ziganda, que acabó satisfecho con la imagen mostrada ante los gallegos, quiere dar continuidad al equipo, aunque podría introducir algún matiz. La duda reside en si Borja Sánchez juega de inicio.
El Oviedo llega a El Molinón dispuesto a lograr un triunfo que le dé aire y suponga un punto de inflexión en un campeonato para olvidar. El estado de alarma ha quedado atrás, pero Asturias entera vuelve hoy a confinarse en casas y bares para seguir el gran duelo del fútbol regional.
Trayectoria Sporting y Oviedo llegan al choque con dinámicas opuestas