Una ilusión sin freno
El San Pablo Burgos se enfrenta al Gran Canaria con las semifinales de la Liga al alcance de la mano
De simple equipo de provincia a gran revelación en Valencia en apenas cinco años. El San Pablo Burgos tiene al alcance de la mano las semifinales de la fase final de la Liga Endesa tras deshacerse del Zaragoza en la primera jornada y dar la campanada en la segunda al doblegar, en un partido serio, valiente e inteligente, al Madrid, actual campeón de la ACB. Solo tres enemigos se interponen entre ellos y el gran sueño de un club que tomó el relevó en el verano de 2015 del Baloncesto Tizona, que cambió la lucha deportiva por la de los despachos tras dos ascensos a Primera no consumados por el canon: Gran Canaria (hoy a las 15:30, MD), Valencia y Andorra. “Tenemos una oportunidad muy bonita”, asegura Joan Peñarroya, entrenador del San
Pablo, que ascendió a Liga Endesa en 2017. “Nuestra prioridad es seguir por el camino marcado hasta ahora y preparar bien un partido contra un rival con mucho potencial”.
Peñarroya es el gran artífice del excelente rendimiento castellano, que perdió para este torneo a su gran referencia debido al parón por el coronavirus: Earl Clark. El estadounidense abandonó el equipo con 12,2 puntos y 6,4 rebotes para 12,5 de valoración de media. Su testigo lo ha cogido el grupo. El cuarteto de pívots formado por Lima, Rivero (la NBA ya se fija en él), Apic y Pablo Aguilar, fichado para esta fase final, demolió al Zaragoza con 36 puntos de los 48 que sufrió en la zona. Frente al Madrid se fueron a los 32 tantos de los 87 totales del equipo. También lucen los pequeños: McFadden y los dos bases, Bassas y Fitipaldo, son puñales en el costado del rival.
Sin embargo, su gran arma no está presente en La Fonteta, pero sí en cada victoria. Hablamos de su afición, la más fiel de toda la Liga. El curso pasado el Coliseum tuvo la mayor asistencia media de la ACB y en esta iba en la misma dirección (casi 10.000). “Siempre les echamos de menos. Sé que aunque no estén aquí, están contentos por lo que estamos haciendo”, concluye Peñarroya.