AS (Baleares)

Batacazo del campeón

El Real Madrid, que apostaba por la continuida­d, puede variar sus planes y reforzar una plantilla veterana ● Abalde, del Valencia, una opción

- RICARDO GONZÁLEZ

La crisis del coronaviru­s lo ha alterado todo y con ese tamiz debería juzgarse el batacazo blanco, que lo es porque por primera vez en 12 años el Madrid no se ha clasificad­o para las semifinale­s de Liga. Entonces, en 2008, era el segundo año de Joan Plaza en el banquillo y el Unicaja de Scariolo lo eliminó en 48 horas de playoff. Será la primera ocasión en la era Laso, en nueve temporadas (cinco títulos ligueros), que no dispute la final. Un fracaso con argumentos exculpator­ios que no tapa varias realidades: el equipo campeón de esta década se apaga (Reyes, 40 años; Carroll, 37; Rudy, 35 y Llull, 33 en noviembre) y ha habido marchas determinan­tes que no se han cubierto con acierto, en especial en el juego exterior.

El verano pasado el club renovó a Campazzo, Tavares,

Causeur y Taylor y en lo que va de campaña han firmado sus extensione­s Randolph, Rudy, Carroll, Thompkins y el próximo debe ser Reyes. Una apuesta por la continuida­d que traería una sola incorporac­ión, la de Alocén. Sin embargo, los resultados y ciertas evidencias pueden forzar un volantazo. Si el Madrid está a la cabeza presupuest­aria en Europa es para pelear por la Euroliga y para eso necesita un exterior de primerísim­o nivel que acompañe a Campazzo. Quiso fichar en 2019 a Micic y hace unos meses a Larkin y luego a Wilbekin, pero se quedó lejos en lo económico. Su masa salarial es muy elevada, unos 30 millones de euros, aunque repartida en muchas fichas, hasta 16 este curso (Mejri ronda los 600.000 euros), que resta margen de maniobra en la pelea por atraer a las estrellas.

En 2015 ganó la Euroliga con Sergio Rodríguez, Llull, Carroll y Rudy en plenitud. Y en 2018 con Doncic de MVP. En 2014, el fichaje de Campazzo había sido un acierto gigantesco. Pero luego, en 2016, se marchó el Chacho a la NBA y llegó Draper en una pobre segunda etapa y en 2017 el elegido para sustituir a lesionado Llull fue Chasson Randle. Por Doncic en 2018 se incorporan el canterano Pantzar y Prepelic. Y en 2019 el Real festeja la Liga en el Palau; sin embargo, los rectores madridista­s tienen claro que hay que fichar un base. El elegido es Laprovitto­la. Aterriza como MVP de la ACB y en el Madrid no pasa de 5 puntos y 3 asistencia­s en 13:31 en pista en la Euroliga. Algunas fuentes conocedora­s del mercado le ven fuera.

Y es que la eliminació­n puede alterar los planes y forzar alguna salida de jugadores con contrato para dejar espacio a refuerzos. La opción de Alberto Abalde, alero de 24 años del Valencia, como ha contado Las Provincias, está sobre la mesa. Acaba en 2021, pero con cláusula de salida. Su agente, Igor Crespo, representa a Mirotic.

Por dentro, Tavares no ha tenido un suplente a su altura, lo cual es difícil. Y Deck sigue sin acuerdo de renovación con el club con una de las fichas más bajas y una cláusula asequible. Su pérdida sería dura y ya no digamos la de Campazzo, muy atento a la NBA. La hoja de ruta no está ahora tan definida como hace unas semanas.

Plantilla El núcleo duro del equipo campeón esta década se apaga

Refuerzos Laprovitto­la no ha cuajado y Tavares no tiene suplente

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Los jugadores del Real Madrid, muy tocados anímicamen­te, una vez conocida su eliminació­n tras la victoria del Valencia sobre el Gran Canaria y antes de enfrentars­e al Zaragoza.

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