Miralem Pjanic, un prodigio de regularidad
El bosnio lleva 417 partidos en los últimos diez años
Aparte de cuadrar sus cuentas con esta operación que es pura ingeniería financiera, el Barça persigue fiabilidad y rendimiento inmediato con Miralem Pjanic (24-1990, Tuzla). Si alguien ha demostrado regularidad en su trayectoria, ese es el bosnio. En sus últimas diez temporadas completas, esto es, entre el curso 2008-09 y el 2018-19, Pjanic jugó 417 partidos, a una media de 41,7 por temporada. Sus cifras son espectaculares. Siendo centrocampista, marcó 65 goles y dio 95 asistencias gracias, entre otras cosas, a ese espectacular toque de balón que le convirtió en un lanzador reputadísimo de faltas en Olympique de Lyon, Roma y Juventus.
Pjanic, jugador de gran calidad técnica y táctica, llega al Barça para intentar que el centro del campo vuelva a pesar en el Barça. Sólo presenta una incógnita. Si su motor está todavía en disposición de aguantar las exigencias del Barça. Con el tiempo, ha ido virando en un jugador más posicional que juega algo más retrasado en el campo. De ahí que sus números hayan pasado de los espectaculares 12 goles y 11 asistencias en la temporada 2015-16, a los cuatro goles y siete asistencias de la temporada pasada. El Barça confía en que la motivación de Pjanic impulse de nuevo su carrera. Su historial de lesiones está limpio. Apenas se ha perdido 19 partidos en su carrera. No jugar fases finales con Bosnia le ha permitido descanso.
Fiabilidad Sólo se perdió 19 partidos por lesión; 65 goles y 95 asistencias