AS (Baleares)

La ley del más fuerte

El Baskonia, más físico, pasa a la final Loyd tuvo el tiro ganador

- J. BURGOS /

El Barça y el Baskonia se citan mañana en la final ACB una década después El equipo azulgrana ganó al Burgos (98-84) y el vitoriano al Valencia (73-75) Thomas Heurtel demostró que está recuperado: 14 puntos y 11 asistencia­s

El Kirolbet Baskonia se enfrentará mañana al Barça en la final. El conjunto baskonista llevó el partido a lo físico desde el salto inicial. Y el Valencia aguantó el envite hasta el final, aunque acabó claudicand­o, mermado y extenuado. Aun así, la garra y el oficio del equipo taronja le hizo quedarse a un solo tiro del triunfo, el que tuvo Loyd, que intentó el The Shot de Jordan contra los Jazz pero esta vez el aro escupió la bola.

Sin que suene a excusa, una de las claves del partido fue la lesión de Labeyrie. El francés, el jugador más físico de todos los que tenía Ponsarnau, se lesionó en el mismo instante que había puesto la máxima renta (+11). Ese fue el principio del fin del Valencia.

En ataque, el Baskonia se sustentó en su trío DragicShie­lds-Shengelia, sobresalie­ndo el esloveno (21 tantos y 25 de valoración), que se echó el equipo a la espalda en los peores momentos. Pero su punto decisivo fue la defensa. Asfixiaron a los exteriores taronjas y lo consiguier­on. San Emeterio y Loyd, en el penúltimo ataque y el americano, en el último, no acertaron con el triple ganador.

Shengelia metió 9 de los 12 puntos de su equipo en el primer cuarto, todos menos el triple inicial de Henry. Y esto eran más malas que buenas noticias para Ivanovic. Mientras, en el Valencia iban anotando todos. Era un partido de paciencia. Y ahí San Emeterio tiene un plus. Laberyrie puso la máxima (41-30, min. 18) y se lesionó.

Jugada crucial para el desarrollo de la semifinal.

Tras el descanso salió un Valencia mucho más apocado y dubitativo. Todo lo contrario que el Baskonia. La sensación era que el equipo vasco dominaba el juego y una canasta de Vildoza puso por primera vez arriba a los visitantes (55-56).

La inercia lanzaba al grupo de Ivanovic hacia la final y el Valencia sobrevivía como podía. Polonara puso la máxima (5763, min. 32) y los de Ponsarnau volvieron a igualar el duelo. Con Labeyrie fuera y Doornekamp y Tobey cargados de personales, era el momento de jugar dentro de la zona. Y ahí estaba agazapado Shengelia. Los de Ivanovic asfixiaban a Van Rossom, que perdió dos balones seguidos. Era casi un match ball. Pero este Valencia es duro de pelar. Loyd forzó una falta en ataque y San Emeterio la puso dentro desde el 6,75. 73-75 a falta de 1:18 para el final. Shengelia falló dos libres y el Valencia tenía tiro para empatar o ponerse arriba. Concretame­nte dos. San Emeterio y Loyd erraron sus triples pero Doornekamp le forzó falta en ataque a Shengelia a falta de 18 segundos. Loyd tuvo el triple definitivo sobre la bocina pero no entró.

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Tornike Shengelia y Aaron Doornekamp pelean por un balón. Van Rossom y Dubljevic, pendientes.

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