Vacaciones sin fútbol
Setién quiere que sus jugadores desconecten totalmente y limpien la mente para volver fuertes
El Barcelona se marcha de vacaciones con una idea clara: desconectar y olvidarse del fútbol para volver más fuertes de cara a la Champions. Tras la sesión de entrenamiento de ayer, Setién concedió seis días de libranza a sus jugadores, que no regresarán al trabajo hasta el próximo martes a las 9:30.
Los jugadores, con alguna excepción para los lesionados, se marchan sin deberes. La idea del cuadro técnico es que desconecten del fútbol y regresen con la cabeza limpia para acometer el gran reto de la temporada.
Setién quiere que sus jugadores desconecten y carguen las pilas, por lo que ha recomendado que durante estos días de descanso se olviden de todo lo relacionado con el fútbol y que se lo tomen como si ya estuvieran de vacaciones. No se les entregará ningún plan de trabajo y será totalmente voluntario.
Y es que los técnicos consideran que con las dos semanas que tendrán por delante, más toda la carga de trabajo acumulada durante estos dos meses, habrá tiempo más que suficiente para llegar en óptimas condiciones al partido de la Champions.
Sólo los jugadores lesionados tendrán que seguir con su pauta de recuperación. Se da la casualidad que el clan francés en bloque se encuentra en esa tesitura: Antoine Griezmann y Clement Lenglet lo tienen mucho más fácil que Samuel Umtiti y Ousmane Dembélé para estar en el partido de vuelta de octavos de la Champions.
El único caso especial será el danés Martin Braithwaite, ya que el delantero no puede jugar la Champions al no estar inscrito y veremos si la UEFA le permite entrenar con sus compañeros por el protocolo de seguridad del COVID-19: recordemos que la LaLiga prohibió que Dembélé coincidiera en el vestuario con sus compañeros al no estar inscrito en la competición. Si es así, Setién podría darle vacaciones definitivas antes de que finalizara la temporada.
Nuevo escenario. Al Barcelona se le abre un nuevo escenario o una nueva oportunidad que llega en aguas mucho más calmadas que en las que navegó el barco blaugrana en las últimas semanas, especialmente tras perder ante Osasuna.
La charla entre los jugadores y la reunión de Messi con Setién tuvieron respuesta en la goleada al Alavés y el panorama se tranquilizó y todos unen fuerzas. Pero hasta el próximo martes, Setién quiere que nadie piense en el fútbol.
Sin deberes El plan físico, excepto para los lesionados, es voluntario