Pirelli señala a los equipos por el triple pinchazo
Forzaron la vida útil de la goma
Pirelli concluye su primer análisis sobre los tres pinchazos del final del GP de Gran Bretaña, que salpicaron a Sainz, Hamilton y Bottas. El fabricante italiano comunica que se debió a “condiciones de la carrera que forzaron un uso extremadamente largo del segundo set de gomas”. El coche de seguridad posterior al accidente de Kvyat adelantó las paradas y la mayoría de coches completaron casi
40 vueltas con el compuesto duro, que es “más de tres cuartos de la distancia de carrera en uno de los circuitos más exigentes”, puntualizan.
Además, señalan al incremento de ritmo de los monoplazas en un año, “la pole fue 1.2 segundos más rápida que en 2019” y los neumáticos son idénticos a los del año pasado. “Se generan las fuerzas más grandes en la historia de los coches de F1”. Se desgastó en exceso el delantero izquierdo, “que es el que trabaja más duro en Silverstone”, “y se le situó bajo un estrés máximo durante un número muy alto de vueltas, por eso estaba menos protegido”.
El constructor de gomas tomará medidas y aumentará la presión mínima de los neumáticos para reducir el estrés, aunque mantiene el plan para el segundo GP en Silverstone: se utilizará una gama más blanda, el C2, C3 y C4 en lugar del C1, C2 y C3.
Aparte de lo que dicen, también está lo que omiten: no hay comentarios sobre piezas de fibra de carbono que pudieran cortar el neumático, o pianos excesivamente agresivos. Apuntan a que los equipos forzaron la vida útil del compuesto y esa parece la única causa del reventón. Recomiendan al menos dos o tres paradas.
Argumento “Hicieron tres cuartas partes de la carrera con un juego”