Richard Carapaz “El Giro te pone en tu sitio aunque aspires al infinito”
Richard Antonio Carapaz Montenegro (El Carmelo, Carchi, Ecuador, 27 años) fue el ganador del Giro 2019 y un héroe en su país, donde pasó el confinamiento. De vuelta a Europa, se estrenó en Burgos y desde hoy compite en el Tour de Polonia. Charló con AS sobre este atípico año.
Richard Carapaz fue una de las sensaciones de la temporada 2019 con su triunfo en el Giro de Italia. Pasó de ser un ciclista con proyección (acabó cuarto en 2018) a toda una estrella mundial, además de ser héroe nacional en Ecuador. Tras su etapa en el Movistar, el Ineos no dudó en hacerse con sus servicios. A pesar del rápido ascenso en su carrera, sigue transmitiendo en el trato la misma humildad y educación que cuando no contaba con un palmarés tan prestigioso.
—Burgos, Polonia... ya se encuentra en Europa disputando carreras, pero las informaciones que nos llegaban desde Ecuador durante el confinamiento es que para llegar aquí vivió una odisea.
—Bueno, al principio sí fue todo muy complicado por la pandemia. La frontera estaba cerrada y no se podía viajar desde Ecuador a Europa. Pero luego ya se solucionó y pudimos venir más o menos tranquilos. Quizá se habló de más problemas de los que tuve. —¿Le costó volver a centrarse en el ciclismo después de todo lo que se ha vivido? —Es algo muy complejo. Mi país fue muy golpeado por esta enfermedad y al principio no podía ni salir a entrenar. Luego sí empecé a ejercitarme y eso ayuda, a la vez que físicamente me iba encontrando cada vez mejor. El llegar a Europa y entrar en cierta rutina también hace que te centres. Pero en el momento en el que tu trabajo te exige rodar en un grupo de casi 200 ciclistas te viene todo a la cabeza. En el plano personal, sé que estamos expuestos. Parece que todas las medidas que se están tomando permiten que la competición se desarrolle. Ojalá el ciclismo, como la sociedad, pueda volver poco a poco a la normalidad. La pandemia ha golpeado a todo el mundo no sólo con los efectos de la enfermedad, sino de una forma psicológica, económica… Si a alguien le sirve sentarse a ver una carrera para despejar la mente, es algo bueno.
—¿Le preocupa que todos estos problemas no le permitan cumplir las expectativas? —Desde luego, teníamos un plan al inicio de temporada que no se va a cumplir. Empezando porque mis objetivos eran defender el Giro y acudir a la Vuelta, algo que el calendario ya no me lo va a permitir. Pero toca adaptarse y el reto de defender mi título en el Giro es lo suficientemente importante como para motivarse. —Se lo preguntaba porque en un equipo como Ineos, con varios nombres que podrían aspirar a las generales más importantes, igual siente presión por demostrar que es merecedor de esos galones. —Tampoco pienso que deba demostrar nada, sólo ofrecer el nivel del que soy capaz. Cuando vine al Ineos las cosas se dejaron claras desde el principio. Aquí hay tres grandísimos corredores (Bernal, Froome y Thomas) que tenían claro que se iban a centrar en el Tour y mi objetivo era ser la referencia en el Giro y en la Vuelta, aunque hayamos tenido que cambiar de estrategia por el cambio en el calendario. Me estoy adaptando poco a poco al equipo, con los latinoamericanos hemos estado entrenando cuando llegamos a Europa y hemos forjado una gran amistad.
—¿Cómo valora ahora su salida del Movistar?
—Sólo tengo palabras de agradecimiento para el equipo, porque ha sido una etapa muy importante en mi carrera, de aprendizaje tanto de las cosas buenas como de las malas. Y mantengo el cariño con los corredores con los que coincidí. —¿Qué balance hace de su rendimiento en Burgos, era lo que esperaba?
—Fue una vuelta a la competición favorable (acabó sexto) y creo que estoy en el buen camino. Era una carrera en la que íbamos a ayudar a Iván Ramiro Sosa. Lo importante para mí es que estoy construyendo una base sólida para lo que nos queda por delante. —La victoria fue para Remco Evenepoel, que va a ser uno de sus rivales en el próximo Giro. Él aseguró que en Italia intentará sacar renta en las cronos porque no sabe si le podrá seguir a usted en las montañas italianas. ¿Usted le ve como un rival directo? —El Giro de Italia es una carrera con muchas particularidades y con una dureza extrema. En la historia ha habido muchos corredores que han llegado a la linea de salida aspirando al infinito y la carrera se ha encargado de ponerles en su sitio. Da igual lo que pensemos antes de empezar, cada uno acabará en el lugar que le corresponde.
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