Albacete amenaza Butarque con un aniversario trampa
El estadio cumple 23 años ante un visitante desatado
Es 14 de febrero, San Valentín. Palpitan los corazones. En Butarque, no por tan romántica efeméride, sino porque es el aniversario de su puesta de largo. El recinto blanquiazul se estrenó tal día como hoy de 1998. Sopla 23 velas en este curso, el más anómalo de su historia. Por sufrir de gradas vacías desde hace casi un año y porque jamás antes sus muros habían visto a los suyos descender de Primera a Segunda. Ahora los observan intentando regresar a la élite como único objetivo desde que arrancó la campaña. Eso también es inédito.
El cumpleaños trae una tarta envenenada. El Albacete no es oponente dulce. A Garitano, por ejemplo, le eriza el ánimo. Dice que, con Mallorca, “es el mejor Segunda del momento”. Y razón no le falta, especialmente como visitante, donde acumula tres victorias seguidas y sólo un empate en los últimos cinco desplazamientos. En el Belmonte, en la última jornada, puso contra las cuerdas al propio Mallorca. Con uno menos y fallando un penalti al final. De ahí que el de Bergara afile las advertencias.
A Asier le da igual que el Lega sea local más sólido de la categoría con el Espanyol. Su mensaje autocrítico ha emergido potente en los últimos días porque sabe que quedan cosas por mejorar. Quiere prietas las filas ahora que arranca una semana fantástica de tres partidos seguidos como local: Albacete, Almería y Tenerife. Para encararla, no promete rotaciones, pero las habrá. Por ahora, Tarín, Arnáiz y Rubén Pérez serán baja. Vuelven Perea, Bustinza y Silva. En el Albacete Diamanká no retornará a Butarque. Tampoco estarán Álvaro Peña, Carlos Isaac y Javi Jiménez, pero sí Gorosito, al que el TAD ha indultado.