Batalla en el sterrato
Valter defiende 11” sobre Evenepoel y 16” ante Bernal en Campo Felice y sus últimos 1,6 km de tierra al 8,8%
Através de los Abruzos, Passo Godi (13,9 km al 4,1%), Forca Caruso (12,7 km al 4,5%), Ovindoli (12,4 km al 5,1%) y Campo Felice (6,6 km al 5,8%) son los cuarto puertos puntuables del menú de hoy, porque el perfil de sierra se completa con otros dos sin catalogar: el Colle della Croce y Fonte Ciarlotto. A la dificultad del sube y baja sin descanso se añade que la meta en alto acaba en sterrato: 1,6 km al 8,8%, con rampas que alcanzan el 14%. Seguramente el test más serio de lo que llevamos de Giro.
Remco Evenepoel no oculta que siente “una mezcla de emociones” frente a la sección de tierra con la que finalizará la jornada: “Por un lado tengo muchísimas ganas de afrontar ese tramo de gravilla y de probar esa clase de ciclismo épico, como el de la Strade Bianche. Por otro, espero que no llueva y que todo nos salga bien, ya que cualquier inconveniente conllevará perder un tiempo precioso”. El belga de 21 años ya no oculta sus intenciones. Empezó el Giro tapado y comedido, según él al servicio de Joao Almeida, cuarto en la edición de 2020. Con el KO del portugués en Sestola, se despejaron las dudas sobre la capitanía del Deceuninck. A sólo 11 segundos de Attila Valter, anhela la maglia rosa: “Me encantaría lucir el jersey de líder. No únicamente se trata de mi estreno en una competición de tres semanas, también la primera tras mi accidente en Lombardía en 2020”.
En el Ineos nunca arrancan una grande sin una jerarquía clara. Egan Bernal manda en el equipo británico. Con mano izquierda, pero sin concesiones. Además, el hipotético Plan B, Pavel Sivakov, se retiró después de caerse camino de Cattolica, como Mikel Landa.
Para el colombiano, Campo Felice se convertirá “en la prueba más importante hasta el momento”. Tanto Evenepoel como Bernal inspeccionaron los sectores de sterrato por los que rodarán el próximo miércoles, algunos de ellos de la Strade, y no así Campo
Felice, que conocen por fotos y vídeos. Según el vencedor del Tour de 2019, a 16” de Valter, lo único que contará ahí serán las fuerzas de cada uno: “Con buenas piernas llegas a cualquier lado”. En su caso, “funcionan bien”, aunque nota “ciertas cosas” todavía en la espalda. “Principalmente al levantarme por la mañana, pese a que no lo considero un dolor, como una sensación extraña”. Marc Soler, 13º, a 1:14 del rosa, confía en crecer a medida que avance la carrera y escalar más posiciones: “Por querer, el objetivo es el top-cinco”.
Marc Soler El líder del Movistar, 13º, a 1:14, confía en crecer a lo largo del Giro