Eden, por mí no vuelvas

Dicen que todo se pega menos la hermosura. Dicho que puede aplicarse a Bale y a Hazard. El galés nos tenía acostumbrado a sus ausencias por “pequeñas molestias”, que no percibían ni los médicos del club. Zidane acabó harto de su pasividad emocional y lo largó para las Islas. Pues Hazard, otro que tal baila, se borró del partido en el que su equipo se jugaba la Liga por otras “leves molestias”, que no respondían a lesión alguna como aclaró el propio club. Hazard no quería correr riesgos para llegar impoluto con su Bélgica a la Eurocopa. Pagamos 30 millones al ‘7’ para que los belgas lo disfruten. En el Madrid está para ir a entrenarse a Valdebebas y disfrutar de la gastronomía española. Lo de jugar y partirse el alma en el campo por este escudo queda para gente humilde y mediocre como Benzema, Modric, Casemiro o Nacho.

Francisco Ortúñez es un sabio madridista de 87 años, socio 5.402 y un tipo feliz por haber celebrado su 60 aniversario de boda con su amada Paquita. Él me ha explicado que Santiago Bernabéu no perdonaba estas faltas de compromiso. “Si un jugador se borraba, iba a la calle”. A Hazard no le iría mal esa medicina. Después de dos años, no hay un solo aficionado blanco que tenga fe en que pueda ser aquí el crack del Chelsea. Al menos, Bale fue el héroe en Mestalla y en Kiev. Hazard, si ese es tu deseo, no vuelvas nunca...