“Este Villarreal tiene un futuro espectacular”
Los 2.100 aficionados desplazados a Gdansk dan las gracias a un equipo que les hace soñar
La afición del Villarreal desplazada a Gdansk vivió las horas previas a la final con los nervios del debut y con la tranquilidad del deber hecho. “Llegar hasta aquí ya es suficiente”, era la frase más repetida por muchos de los paisanos de Vila-real que se rascaron el bolsillo para vivir unas horas históricas. Los nervios de ser el foco del fútbol mundial durante unos días se fueron apoderando de la mayoría con el paso de las horas, así que durante toda la jornada decidieron ir cambiando el plan. Como en los bares iban a perder el duelo contra los hinchas del United, lo mejor era entregarse al turismo para no acomplejarse. El Puente Verde fue el punto neurálgico, aunque varias familias se dejaron ver también por el majestuoso museo de la II Guerra Mundial en busca de inspiración en el coraje polaco, así como por las calles de su puerto y por los inmensos templos religiosos de una ciudad que vive de espaldas al coronavirus. En Polonia no sólo la mascarilla dejo de ser obligatoria, sino que además las miradas se clavan en los que las portan.
Fue después de la comida cuando la marea amarilla se dirigió al estadio para disfrutar de su Fan Zone. Allí, la tertulia se centró en los posibles onces y en las opciones de victoria en un ambiente festivo en el que se dejaron ver Juan Roig, el alcalde de Vila-real, José Benlloch, y el concejal de deportes, Javier Serralvo. El comportamiento de la afición del Submarino fue ejemplar para celebración de la policía y como cortafuegos de la del United, que el martes fue sorprendida por un ataque de ultras locales. Lo mejor es que esta aventura amarilla se repetirá. “Este Villarreal tiene un futuro espectacular y nos dará grandes alegrías”, dice a AS Javier, un socio que bien podría ser el portavoz de un país.
Ejemplar Los groguet dieron una lección de conducta en la previa
Orgullo La policía local y los hinchas del United, entregados