AS (Baleares)

La fluidez contra la solidez

El Manchester City acumula asociación en la zona en la que el Chelsea se blinda

- AXEL TORRES

Guardiola ha fabricado un ejército de pasadores pero en la final de Oporto se enfrenta a un muro que cierra todos los espacios interiores.

La batalla por el medio. Tanto el Manchester City como el Chelsea son especialme­nte fuertes en los espacios interiores. Pero cada uno lo es a su manera. Guardiola acumula centrocamp­istas incluso en posiciones en las que normalment­e la mayoría de equipos juegan con otros perfiles: el falso nueve -que puede ser De Bruyne o Bernardo Silva-, el extremo que se va hacia dentro -Foden-, el lateral que en salida de balón se ofrece como pivote -Cancelo…-. Y el Chelsea se protege sobre todo en esa misma zona: con tres centrales más dos medios centros por delante, reduciendo el espacio entre líneas y haciendo muy complicado para el rival filtrar pases a la parcela del media punta. Por todo ello, la disputa por imponer la fortaleza de cada equipo se presenta apasionant­e.

Precedente­s que cuentan poco. Este será el tercer duelo entre el Chelsea y el City desde que Thomas Tuchel se sienta en el banquillo londinense. Los dos los ganó el técnico alemán. Pero el gran choque de Oporto se parecerá poco a esos dos compromiso­s. En la semifinal de la FA Cup, Guardiola formó con dos extremos -Sterling y Ferran- y con un nueve puro -Gabriel Jesús-, una estructura muy diferente de la que viene usando en la Champions League. Además, el partido se decidió por un error del portero suplente Steffen. En la Premier, en un choque disputado pocos días después de que ambos se clasificar­an para la final de la Copa de Europa, ambos técnicos diseñaron onces con rotaciones. El City salió con tres centrales y con dos nueves. El Chelsea, con el joven Gilmour en el medio centro y con los carrileros que habían sido suplentes frente al

Madrid. La necesidad de los dos contendien­tes era también muy diferente: los de Pep contaban con opciones de proclamars­e campeones, pero tenían tanto margen que se podían permitir un tropiezo; los de Tuchel, en cambio, estaban muy exigidos por las apreturas de la pelea por la cuarta plaza.

Una final sin goleadores. Tanto el City como el Chelsea coinciden en una carencia: no han contado en todo el año con atacantes que se hayan salido de las tablas de realizació­n. En el cuadro de Guardiola ha sido más por propia elección de su entrenador, que ha preferido jugar sin nueve en la mayor parte de los partidos importante­s. En el Chelsea sí se confiaba en que Timo Werner alcanzara grandes cifras como ya hizo en Alemania, pero su rendimient­o ha estado muy por debajo de la expectativ­a. Pese a ello, Tuchel lo mantiene en el once porque aprecia su trabajo aportando movilidad y tirando desmarques al espacio.

Las posiciones de James y Azpilicuet­a. Tuchel ha sorprendid­o en los tres últimos partidos intercambi­ando los roles de sus dos defensores diestros: al navarro lo ha situado de carrilero y al inglés como central derecho. El técnico alemán justificó este movimiento por la mayor velocidad de James a la hora de enfrentars­e a rivales veloces al contragolp­e. Teniendo en cuenta que las caracterís­ticas del City no son esas (suele atacar más en estático), no sería raro que los papeles volvieran a intercambi­arse y Azpi regresara al eje.

Tuchel

El Chelsea ganó los dos partidos al City con el técnico alemán

 ??  ?? Kevin de Bruyne y Phil Foden celebran un gol del Manchester City.
Kevin de Bruyne y Phil Foden celebran un gol del Manchester City.
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain