Miguel Gutiérrez derriba los tópicos del lateral
El Girona ejerce de líder por jugadores como Miguel Gutiérrez, más que un lateral. Aramburu demuestra oficio y en Samu se proyecta un goleador importante. El futbolista del Girona se prestigia como un generador ofensivo inigualable a partir de su creativi
Aquí, un jugón. Como si no tuviera nada de extraordinario lo que está haciendo, el Girona pasa páginas a la Liga con la madurez de un equipo que aspira a lo máximo. En Balaídos se sobrepuso a la eliminación de Copa y se desempeñó con el oficio, la ambición y el buen juego que le caracteriza. Ganó porque fue mejor, sin presumir. Conviene reconocer la participación decisiva de Miguel Gutiérrez (22 años), un lateral que es mucho más que un lateral. Clave por fuera y por dentro, con sus apariciones interiores como tercer centrocampista, su calidad prevalece en todas sus intervenciones.
Es un jugador hecho desde la creatividad. No es habitual que un lateral tenga tanto peso en el juego de un equipo. Miguel Gutiérrez es diferencial y se ha encargado de desmentir todos los tópicos asociados a una posición retrasada al acreditarse como un generador ofensivo excepcional. De ahí que sea el futbolista de
LaLiga que más grandes ocasiones ha creado (10), con la asistencia a Portu ante el Celta como último ejemplo. Apenas Isco, Baena y Aspas, jugadores con otras responsabilidades en el campo, le siguen el paso. Suma ya 22 pases clave y el Girona se sirve de su conexión espacial con Savinho para proyectar su éxito por la banda izquierda, zona desde la que han nacido 16 de sus goles. Hace tiempo que a Miguel Gutiérrez se le ve preparado para retos prestigiosos como el que afronta ahora con el Girona y los que le pueden llegar con el Real Madrid y la Eurocopa de fondo. Conquistar el futuro nunca es fácil, pero su presente se torna en prometedor.
En buenas manos.
Hay futbolistas que cumplen misiones igual de importantes desde otros códigos futbolísticos. Tres titularidades consecutivas -el doble enfrentamiento contra el Celta en Liga y en Copa y la visita del Rayo- han sido suficientes para comprobar el ADN competitivo de Jon Aramburu. A sus 21 años, el lateral derecho venezolano de la Real Sociedad empieza a desplegar sus condiciones de una forma tan simple como efectiva. No esperen nada artificioso en su manera de jugar, porque es la clase de futbolista que lo hace fácil y que responde a la exigencia con soluciones naturales. Contra el Rayo demostró conocer este trabajo. Se hizo fuerte en los duelos (cinco de ocho ganados), cuidó su parcela con esmero y hasta se animó para dar profundidad por el costado. Obviamente, tiene margen de mejora, sobre todo con el balón (17 pérdidas), pero su instantánea contribución apunta a que Imanol disfruta de una alternativa que le garantiza compromiso y solvencia.
Delantero de cifras.
“Samu Omorodion nos ha superado”. La franqueza con la que se manifestó Gaizka Garitano, entrenador del Almería, tras la derrota ante el Alavés resumió el descomunal potencial del delantero. Samu sacó brillo a su zancada y poder de conducción para desfigurar al Almería. El doblete le permitió alcanzar la cifra de siete goles esta campaña, un dato nada desdeñable para ser su primera comparecencia en la élite. Y seguro que los números, imaginamos que en el Atleti, se dispararán en temporadas venideras. Se ve algo especial en los desmarques de Samu, con un catálogo de movimientos que le hace ganar la posición a sus marcadores. Ya ha dispuesto de 21 grandes ocasiones, con un 33% de acierto en la conversión, que se trata de un promedio a tener en cuenta. Si afina un poco más la definición, no parece tener techo.
Líder Es el jugador de LaLiga que más grandes ocasiones ha creado