El Valencia ahoga al Granca
● El Madrid vence al UCAM Murcia (84-79) en los cuartos de la Copa del Rey ● El Valencia será el rival de los blancos en semifinales tras derrotar al Granca (81-89) ● Hoy, Barcelona- Baxi Manresa (18:00) y Unicaja-Lenovo Tenerife (21:00) Los taronjas impo
El Valencia Basket jugará la semifinal de la Copa del Rey mañana contra el Real Madrid. El Dreamland Gran Canaria fue mejor durante los tres primeros cuartos. Pero los taronjas se impusieron en el cuarto periodo y, sobre todo, en una prórroga en la que comparecían de víctimas tras dejarse empatar, cuando llegaron a ganar por ocho puntos a 1:26 del final, con un triple de Brussino sobre la bocina.
El grupo de Mumbrú, sabedor que su ataque no fluye demasiado, llevó el partido a lo físico. Y ahí, en el tramo final, incluido la prórroga, el Gran Canaria dobló la rodilla. Se agarró a la defensa, cuando el equipo insular iba sobre raíles, para no despegarse del partido. Y cuando consiguió igualarlo, salvo el minuto y medio final de colapso de los 40 de juego, ahogó al equipo de Lakovic, que se vio asfixiado en
muchísimos ataques, para acabar imponiéndose en un duelo muy igualado.
Libres fallados.
El Gran Canaria se vio durante muchos minutos en las semifinales. Pero, además de perder la batalla del rebote, le lastró su pésimo porcentaje desde el tiro libre: 5 de 16 en los 45 minutos. Tanto fue el cortocircuito desde el tiro libre que Davies hizo una falta adrede, al final de la prórroga, para obligar a los amarillos a tirar desde la línea... y volver a errar.
El partidazo de Landesberg, con 25 puntos, no le sirvió al
Granca. El Valencia colapsó a Ethan Happ, que a pesar de no fallar en tiros de dos, nunca se le vio cómodo. Gran parte de la culpa la tuvo Brandon Davies. Sólo los superclases son capaces de marcarse un partido así después de presentarse en la Copa sin entrenar con el grupo desde que se lesionó la rodilla, dos semanas y media atrás. Incomodó a Happ desde el salto inicial y además fue imparable para los pívots canarios. Sus números, como si nunca se hubiese ido: 17 puntos y 7 rebotes.
Inglis fue su mejor escudero debajo de los aros. También
hay que ser muy bueno para ser el mejor reboteador y asistente del partido: 6 puntos, 12 capturas y 7 asistencias. Pero al final, el triunfo taronja resultó ser coral, como gusta en La Fonteta. Jovic (13 tantos y 3 pases de canasta), comandó la remontada en el cuarto final y Ojeleye, horrible en los tres primeros cuartos, lideró la defensa y metió dos triples claves al final. Los de Mumbrú se medirán con el Madrid, cansado, con sólo un pívot, recién salido de lesión, y tras una brutal paliza física. Pero no tienen nada que perder. Y eso es lo que les hace más peligrosos.