Objetivo: llegar al Clásico a seis puntos
No vamos a tirar la toalla, todavía hay Liga”. Esta contundente frase, pronunciada por Xavi Hernández en dos de sus últimas comparecencias en rueda de prensa, reflejan claramente la sensación que se vive dentro del vestuario, donde pese a ser muy conscientes de las dificultades mayúsculas del reto, no descartan todavía dar un golpe de efecto en la competición de la regularidad.
Según ha podido saber AS, el objetivo prioritario que se ha autoimpuesto el grupo es recortarle al Real Madrid dos puntos, como mínimo, con el fin de llegar a la cita en el Bernabéu con seis puntos de desventaja. El calendario no es precisamente benévolo para los blaugrana: durante este periodo tienen dos salidas complicadísimas (Athletic y Atlético), otra a priori más sencilla (Cádiz), y dos encuentros asequibles en Montjuïc (Mallorca y Las Palmas). Por su parte, el Real Madrid sólo tiene un desplazamiento complicado (Valencia), aunque hay dos que pueden traer cola (Osasuna y Mallorca), mientras que en casa se las verán ante el Celta, metido en la lucha por evitar el descenso; y el Athletic, en la carrera por la Champions.
De hecho, en el calendario blaugrana se ha señalado en rojo el próximo fin de semana: una victoria del Barcelona en San Mamés y un empate o una derrota del Madrid en Mestalla pondría LaLiga en plena ebullición. En el vestuario han hecho sus cábalas y si consiguen llegar al Clásico con seis o menos puntos de diferencia nadie descartaría nada. Eso sí, habría que ganar sí o sí al Madrid en el Bernabéu, ahora mismo un escenario muy complejo, aunque Xavi recuerda que ya lo han hecho durante su etapa en el banquillo en dos ocasiones: 0-4 en LaLiga y 0-1 en la Copa del Rey, si bien en esta última competición los azulgrana cayeron en la vuelta de las semifinales (0-4) y quedaron fuera de la final.
Si se consiguiera vencer en el Bernabéu, entonces aún quedarían seis jornadas más por disputar, con sólo tres puntos de ventaja por parte de los de Ancelotti: un panorama que abriría miles de escenarios y posibilidades.
Una victoria mínima, además, igualaría el goalaverage entre los dos equipos. Si el Barça fuese capaz de ganar por más de un gol, quedaría a tiro de una victoria.
Y si Xavi no tira la toalla qué decir de Joan Laporta. El presidente es el más resiliente de todas las personas del club y no descarta absolutamente nada, ni tan siquiera levantar la orejona esta temporada e incluso conquistar el doblete. Como demostró ayer en el Mobile Congress, aún cree en las opciones de su equipo.
El vestuario cree que si sale del Bernabéu a tres puntos, puede cantar el alirón
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