‘The Big House’ recibirá a 105.000 aficionados
No se batirán los 109.318 del Madrid-United de 2014
Y a está todo preparado en el Michigan Stadium de Ann Arbor, The Big House, para recibir al Madrid por segunda vez en los últimos tres veranos. La Gran Casa por ser el coliseo más grande de Estados Unidos y eso que sólo llena su inmensa capacidad (oficialmente ha llegado a acoger 115.000 espectadores) para los partidos de fútbol americano de los Wolverines de la Universidad de Michigan que promedian más de 105.000 espectadores en sus partidos desde 1975...
Para ver al Madrid de Zidane, ayer se habían vendido alrededor de 105.000 entradas y será el bolo veraniego blanco con mayor afluencia. En Columbus acudieron 86.641 espectadores al Ohio Stadium y en el MetLife de Nueva Jersey, donde el Madrid se las verá con el Bayern el próximo miércoles, hay 82.500 asientos. Pese a ello, el Madrid no va a lograr alcanzar su propio récord en el Michigan Stadium. Hace dos veranos, congregó a 109.318 hinchas en un amistoso contra el Manchester United (ganaron los ingleses 1-3) estableciendo la plusmarca aún vigente para un partido de soccer en Estados Unidos.
Sea como fuere, el Madrid, al igual que los Wolverines, es un negocio redondo para Ann Arbor. Esta diminuta ciudad de 110.000 habitantes (menos población que Alcobendas, por ejemplo) gira en torno a la Universidad de Michigan. Según un estudio económico de 2013, cada partido de fútbol americano universitario (hay siete por temporada) deja en los hoteles, restaurantes y negocios locales cerca de 11 millones de euros porque el 85% de los aficionados son de fuera. Con el Madrid-Chelsea pasará lo mismo.
También será un ‘pelotazo’ para la Universidad de Michigan, la antigua escuela, por cierto, del nadador Michael Phelps. La International Champions Cup le ha alquilado el estadio por 450.000 euros fijos (los gastos de un partido rondan los 60.000 euros) más un porcentaje de las entradas, el parking y hasta el merchandising de Madrid y Chelsea. El césped. El partido no tendrá sobresaltos por el césped. La International Champions Cup ha dispuesto a petición de ambos clubes el cambio de la hierba sintética (TurfField) con la que juega la Universidad de Michigan por hierba natural para evitar riesgo de lesiones.
Los jardineros de la universidad han operado bajo la supervisión del Madrid (Burgess, el jardinero madridista, viajó a Ann Arbor hace tres meses) y han desplegado 25 rollos de hierba. Se ha creado un estructura para ubicar la hierba natural justo por encima de la sintética y que así esta no sufra daños.
Negocio Los hinchas que irán a Ann Arbor gastarán 11 millones de euros