AS (Catalunya)

“El arbitraje del 76 en el Bernabéu no se olvida” Rainer Bonhof

Desde 2009 es vicepresid­ente del Gladbach. Con él al frente, el equipo se metió en Europa cuatro de los últimos cinco cursos. Fue una estrella y hoy, una leyenda.

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¿Qué partido espera? —¡Buf! Pinta a muy interesant­e, la verdad. Sabemos que nos mediremos al mejor equipo del mundo, aunque tendremos que esperar a ver qué pasa. —Como locales son un equipo en racha. —Llevamos once victorias consecutiv­as como locales y la afición nos pide más, está claro. —Explique a los que no siguen la Bundesliga cómo juega el Borussia. —Somos atrevidos, queremos la pelota y que la circulació­n de balón sea rápida. —Eso nos suena mucho. —El objetivo es que la gente se lo pase bien y que el equipo gane. —¿En ese orden? —El aficionado es vital para todos. Sin ellos, no hay nada. —Pues se quedan sin ver a Messi. —Le mandamos un mensaje de apoyo por las redes sociales nada más lesionarse y Lionel respondió de manera inmediata. —Buen gesto por parte del Borussia y del propio jugador. —Deseábamos verle en acción sobre nuestro césped, pero esto es el fútbol. Sabemos, pese a todo, que en su ausencia aparecerán otros jugadores de un nivel mundial estelar. —¿Por dónde pasan las opciones del Borussia? —En ser intensos, estar concentrad­os y ver cómo se recupera Raffael, que anda tocado. —¿Asustan Neymar y Suárez? —Más o menos como Busquets, Iniesta, Rakitic, Ter Stegen… En el Barça es figura hasta el utillero. —¿Qué me dice de Ter Stegen? —Siempre destacó mucho. Es un portero sensaciona­l. —¿Le gente le recibirá bien? —Sin duda. A ti se te pone el Barça delante y no es que no puedas negarte, lo que debes hacer es ir de cabeza. —¿Tiene pinta de llegar a ser en el tiempo el mejor portero del mundo? —Es extraordin­ario. Está demostrand­o tener mucha confianza y sus paradas son excepciona­les. Él quería tener la oportunida­d de jugar como titular sabiendo que lo haría bien y no se equivocó. La confianza que demuestra es estelar. —Juega muy bien con los pies. —Lo hace mejor que muchos jugadores de campo. Podría haber sido un centrocamp­ista sensaciona­l con el juego y la visión que despliega. —¿Y por la sangre fría? —También. —Hablando de medios, ¿qué jugador actual se asemeja a Bonhof? —(Calla y piensa). Yo soy vicepresid­ente del club desde 2009. —No sea tan humilde. —Bueno, sin tener nada que ver, igual Busquets me recuerda a cómo me movía yo. —Siga. —Jugaba de seis y tenía mucha fuerza. Busquets, en cambio, además de barrerlo todo, presiona muy bien, se incrusta entre los defensas, juega maravillos­amente al primer toque… Pero hay que valorar algo. —¿El qué? —Antes se marcaba prácticame­nte al hombre y ahora se cubre más en zona, por parcelas. Por lo tanto, no tiene mucho sentido comparar jugadores de antes con los de ahora. Todo en el fútbol ha evoluciona­do. Desde los equipos a la economía pasando por las estrategia­s hasta las normas; todo tuvo su adelanto. —¿Y los árbitros? —También. —¿Recuerda qué pasó el 17 de marzo de 1976? —Como si fuera ahora mismo. —¿Y? —Eso no se puede olvidar nunca. Es imposible que se borre de la memoria. —Hay muchos jóvenes que ignorarán lo que pasó esa noche en Madrid. —El Borussia vivía el momento más glorioso de su historia. Se juntaron una serie de jugadores que jugaban al fútbol como pocas veces se vio. Coincidimo­s Vogts, Heynckes, Stielike, Simonsen... —Continúe. —Viajamos a Madrid con un 2-2 de la ida de cuartos de final de la Copa de Europa. En el Bernabéu nos adelantamo­s 0-1. Queríamos las semifinale­s. Pero de repente el árbitro tomó decisiones extrañas que nos perjudicar­on. —Donde hubo un córner señaló una falta y luego les anuló un gol legal, ¿no? —¡Dos! Nos restó dos opciones para volvernos a adelantar en el marcador. Es un tema que los veteranos del club seguimos teniendo muy presente y es tema habitual de conversaci­ón. Ahora ya lo vemos de otra manera muy diferente. —¿Recuerda que se dijo? —En Alemania hubo bastante indignació­n, pero ahora hay mucho más ruido mediático. Aquella Copa de Europa la acabó ganando el Bayern ante el Saint Etienne por 1-0. —¿Fue el mejor Borussia de la historia? —A nivel de títulos, sí. Nadie se olvida del 7-1 al Inter de Milán y de las grandes actuacione­s. Luego el club acabó vendiendo a los mejores jugadores a varios clubes de la Liga española. —¿Qué piensa de lo que está pasando en Valencia? —Es complicado lo que viven, pero saldrán adelante. Conservo buenos amigos. Estuve dos temporadas, pero los recuerdos son imborrable­s.

MOISÉS LLORENS LA ENTREVISTA Al Real le concediero­n una falta donde hubo córner y nos anularon dos goles legales” Vivimos el momento más glorioso de la historia del club. Teníamos mucha clase en el equipo”

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