El Girona, juez del futuro de Sandoval en Vallecas

El técnico: “El run run está ahí, el fútbol son resultados”

Ser entrenador en el banquillo de un equipo madrileño en Segunda debería ser declarado de ‘alto riesgo’. El Getafe prescindió de Esnaider; el Alcorcón, de Contra y ahora es Sandoval quien está en la cuerda floja. Sólo una victoria le serviría para salvar este match ball. El Rayo encadena tres partidos sin ganar (dos de Liga y uno de Copa) y sólo ha sumado un punto a domicilio, algo que le ha hecho distanciarse del líder, un Levante que ya se encuentra a once puntos.

“El presidente no ha hablado conmigo. El run run está ahí y lo entiendo, el fútbol son resultados. Estoy con más fuerza que nunca. Los técnicos tenemos que vivir con esto. Las batallas no las gana el general, sino los soldados y confío en los míos. Esto es un maratón, si a los 10.000 metros ya juzgamos al atleta... malo. Tengo la conciencia tranquila”, confesó ayer el de Humanes en rueda de prensa. Para la gran batalla, el míster madrileño recupera a Embarba y Javi Guerra, una vez superadas sus lesiones en el bíceps femoral. Mientras, se caen de la lista Miku y Aguirre, por decisión técnica. Tampoco están los lesionados Baena, Íñiguez, Dorado, Toño y Quini, este último con molestias tras la visita del Nàstic.

Por su parte, el Girona sigue dando una de cal y otra de arena. Atrás, han recobrado su solidez al haber recibido un solo gol en cinco partidos. Arriba, no está siendo eficaz y lleva dos encuentros sin ver puerta. Machín medita alinear juntos en el mediocampo a Portu y Borja García, a quien Sandoval hizo debutar con la Franja y formó parte de la plantilla que logró el último ascenso a Primera. Un mecanismo para tener más posesión, pero un único nueve.

Hoy habrá plebiscito en Vallecas para un Rayo que no puede ceder más terreno en su carrera a Primera y para un Sandoval, en tela de juicio.