Garitano, con sus tres reyes magos

Decía ayer Garitano que el Deportivo necesita dar una campanada lejos de Riazor, y tiene toda la razón del mundo. Los coruñeses no ganan fuera de casa desde la penúltima jornada de la pasada temporada, en la que un 0-2 en El Madrigal les valió para salvar la categoría. La cosa ha ido tan mal a domicilio que ese triunfo ante el Villarreal fue el único que consiguió el Depor en todo 2016. Así que, como suele decirse: año nuevo, vida nueva. El primer intento de 2017 tendrá lugar esta noche en Cornellà, un estadio maldito para los herculinos. El triunfo acabaría con ese gafe, rompería la horrorosa tendencia fuera de casa y, sobre todo, serviría para afianzar el buen trabajo que realizó el equipo en diciembre. Sin duda fue su mes, ya que sirvió para abrir un pequeño hueco con el descenso y tumbar al Betis en Copa.

Para lograr el objetivo Garitano tirará hoy de sus tres reyes magos: Andone, Joselu y Çolak. El técnico vasco anda corto de efectivos ofensivos desde la ‘fuga’ de Babel al Besiktas, la marcha de Fayçal a la Copa África y la lesión de Carles Gil. Pero es consciente de lo que hay en juego. De la importancia de que el equipo crea que es posible ganar lejos de A Coruña tras rozarlo en Granada, Málaga y el Bernabéu. De lo trascendente de no caer de la ola buena, de esa que incluso le permitió remontar un 0-2 el martes en Copa ante el Alavés en un partido que parecía perdido. Por todo ello hoy envidará a grande y por primera vez pondrá a sus tres reyes magos en un once titular para intentar hacer daño al sólido Espanyol mientras espera de que los regalos, o sea los fichajes, no se demoren ya mucho más.