Longo y Sandaza brillan entre el barro y la lluvia
Nueva victoria de los catalanes, que suman ya 42 puntos
ElGirona empezó la segunda vuelta como acabó la primera, como un avión. El conjunto que prepara Pablo Machín vivió una jornada redonda, cosechando la octava victoria en nueve encuentros mientras el Getafe se dejaba dos puntos más en casa. Eso sitúa a su perseguidor más inmediato a seis puntos. Queda un mundo pero la renta ya empieza a ser importante.
Y todo eso lo consiguió en un Montilivi donde el mérito principal fue aguantar la verticalidad. Llovió mucho antes y durante el encuentro, planeó la amenaza de suspensión pero los equipos acabaron saltando al terreno de juego y fue imposible rasear el balón.
En ese escenario, el Girona se desenvolvió mejor que el rival. Minimizó el riesgo en su parcela, hizo del despeje con intención su principal arma, corrió con criterio hacia adelante y acabó imponiendo su físico y focalizando el juego en la parcela rival, a la espera de un error de marca, un resbalón o una jugada de estrategia. Y así llegaron los goles.
En el primero, el Sevilla Atlético estuvo cándido en la defensa de un córner sacado en corto, Alcaraz tuvo tiempo para colocar el balón con temple y Longo, ganando por arriba a los centrales, batió a Caro con un cabezazo franco ( 59’) desde el corazón del área.
El segundo también se originó en un córner en el flanco derecho de la zaga visitante pero el balón acabó en el otro costado donde Maffeo, nuevamente con tiempo para pensar, centró desde el extremo y Sandaza se elevó, poderoso, y cambió la dirección con un testarazo que batió a Caro con una bonita parábola. El toledano ya lleva cuatro jornadas consecutivas marcando.
El juego fue muy discontinuo y arrancó mejor el filial sevillista, percutiendo, sobre todo, por su banda izquierda, muy maltrecha por el agua. Ramalho y Maffeo empezaron con problemas pero no tardaron en cerrar esa vía.
Las mejores ocasiones visitantes también fueron en jugadas a balón parado. En el 9’, en un córner a la derecha de René, Fede San Emeterio tocó el balón con la cabeza en el segundo palo pero el meta atajó antes de que un segundo jugador sevillista llegara a él.
En el 32’, en una acción muy similar en la que falló el portero, San Emeterio remató a puerta pero un defensa envió el balón nuevamente a córner ( 32’). En el primer acto, lo más cerca que estuvo el Girona del gol fue en un disparo de Longo ( 38’) a la media vuelta que se perdió un metro a la derecha del palo. Un minuto después, Aday remató flojo un centro bombeado de Pons.
El Sevilla Atlético acabó viviendo casi siempre en su parcela, incluso cuando el marcador ya demandaba un paso adelante. Un disparo lejano de Ivi que René desvió con problemas ( 86’) fue lo máximo que logró.
El Girona sumó ayer su octava victroria en los últimos nueve encuentros
Planeó la amenaza de suspensión, pero los equipos jugaron y fue imposible rasear el balón