Bale, una estrella de cristal
Se rompió en el 36’ y es su lesión 17 en el Madrid, ocho de ellas en los sóleos Puede perderse la semifinal ante el Atlético
Bale se despidió de su partido número 100 en Liga en el minuto 36 de un Clásico y con su lesión número 17 como futbolista del Madrid. El galés sigue cebando su leyenda de ser un purasangre frágil. Más de Bohemia que de Cardiff. De esas 17 lesiones, ocho han sido en los sóleos, su particular punto flaco. Seis han sido en el izquierdo (la última es la del Clásico) y dos en el derecho. Otra lesión que devuelve al 11 blanco a la casilla de salida y pone a Zidane en un apuro. Sigue evidenciando que no es impermeable a la fijación del palco con la BBC, un problema que ya vivió Ancelotti, como cuenta el italiano en su libro en el que relata como Florentino le llamó a capítulo por sentar a Bale. Ayer, Zizou volvió a enfrentarse a su propio discurso. “Nunca arriesgaré con un futbolista si no está al 100%”, ha dicho hasta la saciedad. Una regla de la que exime al trío estelar.
Porque Bale juega sin confianza en sus gemelos. Bajo sospecha sigue su manera de correr por culpa de la protrusión en la espalda y el galés ha llegado a recurrir a trucos inauditos. A finales del curso pasado apareció con agujeros en la parte posterior de las medias y, según la prensa inglesa, también hizo un duro sacrificio y renunció a los Lamborghini porque cree que la postura de conducción aumentaba el riesgo de lesión...
Nada le ha funcionado. La cinta antigravedad de la NASA que hay en Valdebebas y que le permite correr soportando sólo el 20% de su peso corporal se ha convertido es su mejor amiga. Pero cuando le toca exprimir su físico de verdad, en un partido, su seguridad se evapora. Tampoco ha ayudado su actitud. Zidane tuvo que tragarse un año el sapo de que Bale fuera baja para ir a Vila-Real por una sobrecarga... mientras se le vio en el día de descanso jugando 36 hoyos en Valderrama. En la penúltima lesión, el británico se entregó a una pasión nueva, las retransmisiones de artes marciales mixtas de su ídolo, el brasileño Anderson La Araña Silva.
Bale renovó hasta 2022 con sueldo de futbolista bandera pero esta campaña ha jugado sólo el 40,5% de los minutos posibles y se está ganando un lugar en la nómina de madridistas recientes que jugaban con la pegatina de ‘Muy frágil’ en el costado. Los Robben, Kaká, Sahin, Metzelder, Woodgate...
Mañana se hará las pruebas y se verá si llega a la ida de semifinales con el Atlético (2 de mayo). Isco, Asensio, James y Lucas Vázquez, expectantes.