Cerveza y hamburguesas del Madrid en Cardiff

Miles de madridistas y juventinos han hecho de la ciudad una fiesta

Mae Caerddyd yn barti. Cardiff es una fiesta, rezaba en galés un cartel. Miles de madridistas y bianconeri tomaron ayer la capital galesa y empezaron a disfrutarla calle a calle. Cerveza fría (en abundancia) pese a la lluvia, hamburguesas especiales según animes al Madrid o la Juventus y fotos con los populares bobbies. Ni nuestro compañero Tomás Roncero pudo resistir la tentación de calzarse el tradicional sombrero abombado de la policía británica…

Mientras que los juventinos se asentaron en la zona sur, alrededor de Callaghan Square, el norte, y los alrededores del Castillo, fue terreno para el blanco y el morado. Hoy, el punto de encuentro blanco en Churchill Way funcionará a toda vela desde las 10:00 horas. Dentro de la ruta culinaria, algún restaurante se llevó el premio al ingenio. The Grazing Sheed (en St Marys Street) ha creado la Real Burguer, con queso de cabra y chorizo, la Juve Burguer, con bacon y el toque italiano del queso gorgonzola. Ambas, a diez libras (11 euros). Pero la tierra tira, y en los principales puntos españoles (Tapas 44 Bar y Curado) ya costaba ayer encontrar resquicios donde apoyar el codo. “Jamoncito para coger energías”, decía un madridista. Algunos atrevieron en los pubs con el welsh rarebit, un plato con queso fundido especiado básico en la cocina galesa.

Ambiente. Y es que ‘locos’ por el fútbol y estrellas se entremezclaban ayer por Cardiff. Will.i.am, cantante de los Black Eyed Peas, que actuarán hoy en el descanso, se dejó ver por el local de moda entre los cardiffians, el Tiger Tiger. Madridistas y bianconeri compartían las barras de Castle Street sin que la cosa fuera más allá de algún vacile amistoso. Avituallar las gargantas fue la constante para seguir cantando el “¡Forza Juve!” y el más blanco “¡Cómo no te voy a querer!”, lo primero que escuchó el Madrid al pisar su hotel. Francisco, malagueño, exprimió sus cuerdas vocales agitando un banderón con las once Copas de Europa. “Viví la Liga 33 en mi Málaga y ahora vengo a por otra Champions”. Hasta el exjuventino Gianluca Zambrotta, presente a unos metros con una televisión italiana, se giró para ver qué pasaba.

Entre las oleadas de hinchas, eso sí, nadan con maestría los reventas. La South Wales Police los vigila. “Busco dos entradas, pero por favor, no me estaféis”, imploraba el cartel de un galés a las puertas del estadio. La policía está empleando el ultramoderno sistema de reconocimiento facial antiterrorista para cruzar las imágenes con su archivo de revendedores de entradas falsas. Para que a nadie se le atragante la fiesta.

Fotografías Los ‘bobbies’ fueron un reclamo para los hinchas