Muguruza se desata y jugará la final ante Venus
Arrolló a Rybarikova y se enfrentará a Williams, que ganó a Konta
Rotundo Garbiñe iguala su victoria más abultada en un Grand Slam
Garbiñe Muguruza vuelve a la final de Wimbledon dos años después. En 2015 perdió ante Serena Williams y mañana (15:00, #0 y MD2) tendrá una nueva oportunidad ante su hermana mayor, Venus. Ayer, en semifinales, pasó por encima de la eslovaca Rybarikova: 6-1 y 6-1.
Garbiñe Muguruza jugará mañana la final de Wimbledon por segunda vez en su carrera (la otra la disputó en 2015 con derrota ante Serena Williams). Ayer, la española pasó por encima de Magdalena Rybarikova, a la que ganó por un doble 6-1 en poco más de una hora. Así igualó su victoria más rotunda en un grande, el 6-2 y 6-0 que le hizo a la francesa Myrtille Georges en segunda ronda de Roland Garros 2016, el año de su título en París.
Con una determinación y un hambre de gloria impresionantes, Garbiñe no dio opción a la eslovaca, que había ganado en el último duelo particular, hace dos temporadas sobre la hierba de Birmingham. La rival de Muguruza por el título será otra Williams, Venus, que venció en la segunda semifinal a la británica Johanna Konta: 6-4 y 6-2.
Garbiñe era favorita, un estatus que le concedía la propia Rybarikova, jugadora modesta que jamás había pasado de la primera semana de un Grand Slam hasta ahora y que fue eliminada en primera ronda en sus siete primeras visitas a Wimbledon. Este año, tras pensar incluso en la retirada por una lesión en la rodilla derecha, se destapó, y en Londres apeó, entre otras, a Karolina Pliskova y Coco Vandeweghe para colarse en la penúltima ronda sin nada que perder. Pero chocó con la mejor versión posible de Muguruza, que se presentaba a estas alturas en la pista central, tras habar jugado antes en la 1, la 2 y la 3. El impacto fue enorme. Con un juego de ataque y riesgo, desbordó a Rybarikova. Fue mejor en todo, desde el fondo, en la red, con su servicio, de derechas, de revés... y la número 87 del ránking se dejó apabullar.
Garbiñe no regaló casi nada, solo 11 errores no forzados y 22 golpes ganadores frente a los 8 de la eslovaca de 28 años. En el segundo juego ya le rompió el saque y repitió en el cuarto encarrilando el primer set. Esta vez estuvo felina con las voleas. La segunda manga empezó con otro break de la española, que seguía jugando a toda máquina, rumbo a la victoria. Sumó uno más en la siguiente ocasión que restó (lo hizo fenomenal durante todo el partido) y estuvo a punto de repetir después. Lo haría de nuevo para cerrar el triunfo con un punto ganado en la red, a lo grande.
Muguruza, que sube al octavo puesto del ránking y será cuarta si gana mañana, regresa a la final del torneo que la vio nacer como estrella. Con solo 23 años ya acumula tres y un título, siguiendo la estela de Lili Álvarez, Arantxa Sánchez Vicario y Conchita Martínez.