Cuatro jugadores y Quique tienen un pasado azulón
Granero fue estrella del Getafe
Durante dos temporadas, Esteban Granero fue una de las estrellas de un Getafe que alcanzó cotas inesperadas. Entre 2007 y 2009, los madrileños jugaron una final de Copa del Rey y llegaron a los cuartos de final de la Europa League, eliminados por el Bayern de Munich. El Pirata es uno de los cuatro jugadores del Espanyol con pasado azulón, y quizás el que más recuerdo dejó en el Coliseum: en la Liga jugó 62 partidos y marcó nueve goles en esas dos campañas.
Antes de irse a Suiza y aterrizar en el Espanyol, Víctor Sánchez también pasó por el Getafe. Lo hizo en la campaña 2010-11, tras jugar el curso anterior con el Xerez. El mediocentro perico ya ejerció de comodín en aquel equipo y llegó a disputar 29 partidos, 21 de ellos de titular. Su paso fue fugaz, como el de Naldo Gomes, quien únicamente participó en la campaña 2014-15 en la que disputó 30 partidos.
Pero el otro jugador perico que dejó una huella más grande en Getafe fue Álvaro Vázquez. Aunque fue irregular, y vivió varias etapas entre 2011 y 2016, el canterano blanquiazul disputó 81 partidos de Liga y anotó 14 goles. El Espanyol pagó más de tres millones de euros por su traspaso la pasada temporada.
Al margen de estos cuatro jugadores, Quique Sánchez Flores también se mide al que fue su primer club en la elite (en la campaña 200405) y en el que vivió una segunda etapa con fuga en la segunda vuelta. “Hubo un intercambio de condiciones. Dejé claro que ningún jugador se fuera. Después de un mes y medio, se incumplió la palabra”.