Kroos y Kovacic y la función de Casemiro
El croata podría acompañar al alemán, que siempre sufrió como medio posicional
El eje. El enredo por falta de defensas al que se enfrenta el Madrid ha camuflado la repercusión de la baja de Casemiro como mediocentro posicional. Kroos patinó en ese rol cuando lo asumió. Zidane podría protegerle con la escolta de Kovacic.
Carencias en el medio.
El Madrid se articulará mejor con una especie de doble pivote formado por Kroos y Kovacic, con Modric como tercera pata, para controlar una zona que a veces ni el propio Casemiro llega a abarcar por estar demasiado solo. Sin ir más lejos, el Borussia se benefició de los espacios que se abrían entre los centrales y la medular. Un precedente a tener en cuenta por Zidane.
Apariciones. La categoría de un Sevilla en alza, pese al paso atrás contra el Maribor, no permitirá desmanes al Madrid en esa zona. Vázquez se intercalará entre líneas. También Nolito asomará en esa franja y surtirá de balones interiores a Ben Yedder. Los desmarques del galo probarán a Vallejo y Nacho.
Vigilancia. Se antoja fundamental para el Madrid la anticipación de los centrales y la compaginación de ambos en la marca de Ben Yedder y en las ayudas. El Sevilla se alargará por los dos costados con Nolitio y Navas. El extremo sevillano siempre generó dificultades a Marcelo en el uno contra uno.
Los laterales sevillistas no lucen la profundidad de antaño, más contenidos con Berizzo. Triángulo. El perfil de los laterales no es lo único que ha variado Berizzo. Empezó con un 4-3-3 para desplegarse ahora con un 4-2-3-1, sobre el papel. Retrasó a Banega como acompañante de Pizarro y colocó a Vázquez por delante. Los tres se escalonan y establecen un triángulo que allana las transiciones.
Banega. Toca y toca el Sevilla por dentro y se protege con el balón en caso de no tener ninguna situación clara de avance (82% de precisión en el pase en LaLiga). Gravita su juego sobre la figura de Banega, al que el Madrid intentará averiar con una presión incisiva de Modric e Isco.
Empuje madridista. El Sevilla gana con el regreso de Kjaer en seguridad, pero pierde capacidad en la salida sin Geis, remedio en partidos anteriores. Bloque alto del Madrid como en duelos pasados para recuperar en la periferia del área sevillista.