Diego, David, Darder y Gerard, los intocables
La dirección deportiva ve en ellos la columna vertebral. Solo temen el adiós del punta, al compartir derechos con el Villarreal
l Espanyol piensa en acabar la temporada de una manera digna, como explicó el pasado miércoles el director deportivo, Jordi Lardín, en Madrid, ante los medios de comunicación presentes en la Cena Pirata que organizó Esteban Granero. Ese es el mensaje interno, a la expectativa de que el equipo, con una victoria el próximo domingo ante el Alavés, pueda recortar puntos con el séptimo clasificado y, al menos, recuperar una parte de la ilusión por quedar más cerca de ese puesto que del décimo.
Pero, obviamente y como se ha ido explicando en este diario, la planificación de la próxima temporada está pendiente de la economía, del nuevo crecimiento de salarios de los contratos firmados en 2016, de una nueva política de fichajes y de las ventas. Sin embargo, hay un aspecto que es innegociable para la dirección deportiva, y es la columna vertebral del equipo. Esta la formarán Diego López, por quien el club apostó fuertemente el curso pasado y quien ha demostrado su profesionalidad y valía; David López, que tiene contrato en vigor aunque podría recibir ofertas; Sergi Darder, la gran apuesta de la entidad; y Gerard Moreno, el caso más peliagudo. Estos son los cuatro jugadores en los que se debe sustentar el equipo la próxima campaña, tanto el estilo de juego como su importancia en el césped.
El caso de Sergi Darder y Diego López no tiene vuelta de hoja. Ambos, con contratos largos, seguirán en la plantilla. David López no entra en los planes de venta del club. Aunque por Aarón Martín no se ingresen los 17 millones de euros que se esperaban, la dirección deportiva priorizaría vender a otros jugadores antes que a David López, intocable. Es por eso que el central solamente se iría en el caso de que algún club pagara su cláusula (40 millones) o le llegara una oferta que le entusiasme (de la Premier) a la par que el proyecto deportivo del Espanyol no sea todo lo atractivo que le gustase.
Pero el caso más delicado no es el suyo, sino el de Gerard Moreno. El delantero sí que está despertando interés de grandes clubes. Sus derechos, cuyo 50 por ciento pertenece al Villarreal, hace complicada cualquier operación de retenerlo, ya que el Espanyol se vería obligado a igualar la oferta. En la dirección deportiva no van a escuchar ninguna propuesta por el de Santa Perpetua, aunque si esta es superior a los siete kilos ya se verían obligados a negociar y pagar por él. Gerard tiene una cláusula de 40 millones, que el 1 de julio será de 50.
El central solo se iría si pagan su cláusula o si le llega una oferta que le entusiasme
Por el punta deberán negociar si la ofertas es superior a siete millones