Roglic vuela en la crono y se acerca a la txapela
Dejó en la general a Landa a 1:51 y a Nairo a 2:08
La crono de este año en la Vuelta al País Vasco cambió su habitual ubicación en el cierre de la ronda para situarse en el ecuador. Toda una novedad, una invitación a las sorpresas... que quedaron ahogadas por Roglic desde las primeras pedaladas. En un recorrido de 19,4 km totalmente llanos, sin tramos revirados ni zonas de descanso, había que estar casi media hora acoplado a la máquina con un esfuerzo constante. El mordisco a partir de Sartaguda, poco después de la mitad de la travesía, hasta meta, con un desarrollo de 58 de plato, fue abismal, como en 2017 camino de Eibar.
Alaphilippe, el anterior líder, se queda en la general a 34 segundos, y los otros dos grandes candidatos viajan a un mundo: Landa a 1:51 y Nairo a 2:08. El colombiano avanzó que el Movistar se jugará la baza de Mikel. La forma de entrar en Lodosa del esloveno fue una demanda clara de txapela: muy tumbado, con una potencia descomunal. Antes de dedicarse al ciclismo hacía saltos de esquí, y lo de ayer en la Itzulia fue un gigantesco brinco hacia la victoria.
Roglic completó el recorrido en un tiempo de 22:26, con una ventaja de 42 segundos sobre el desposeído amarillo, Alaphilippe, ayer octavo. Segundo en la cuarta etapa fue el neozelandés Bevin, que rozó el triunfo durante largo momento con 22:35. Y el podio lo completó Kiryienka, excampeón del mundo de la especialidad.
El jefe del Lotto-Jumbo tiene la carrera a punto, pero aún le esperan emboscadas de los pocos aspirantes que quedan al título, y especialmente de los que se han quedado sin opciones y buscarán algo de relevancia. Hoy, vuelta al perfil con trampas, entre Vitoria y Eibar.