Transmitir para cambiar el Espanyol
Asisto preocupado estos días a acontecimientos que se ciernen en torno al Espanyol, mientras veo como, uno a uno, todos se pasan la patata caliente de salir a dar la cara ante el socio, de transmitir la realidad. Una entidad que parece mantener el piloto automático dirigido hacía el vacío más profundo, la intrascendencia. Es necesario un enfoque perico al nuevo diseño. Casi me atrevería a decir que todo enfoque realizado por alguien que no entienda de gestionar una empresa de sentimientos deportivos está abocado al fracaso. Dirigido hoy el Espanyol de forma fría y poco locuaz, ajena y alejada al socio, despreciando a algunos de aquellos que se dejan la vida altruistamente por levantar la entidad, ni que sea por su sentimiento de pertenencia a la causa perica, como son los miembros de la Grada Canito.
Tras dos temporadas y media de proyecto de
Rastar, la desconexión existente entre la directiva y el socio es total. La inacción de directivos ajenos a la realidad perica está llevando a todos a una muerte lenta, que provoca deserción en la grada y frustración a raudales. Solo un perico de base es capaz de comprender cuan compleja es la realidad y a trazar un plan que llegue y cale hondo en el espanyolismo. Porque la entidad que se aleja de su esencia, de su filosofía, del sentir de sus socios está condenada al naufragio. Por eso, ruego encarecidamente que el club cambie de rumbo, que apueste por gente a quien no le dé miedo explicar la verdad de la entidad. Solo un perico puede echarse el club a sus espaldas sin miedo a perecer en el intento. Reflexionen, no dejen que el Espanyol siga perdiendo su esencia.