Víctor Sánchez: “Tenemos el amor propio muy herido”
El capitán está confiado: “Le daremos la vuelta a esto”
Víctor Sánchez las ha vivido de todos los colores en el Espanyol, y ahora le toca de nuevo la del negro más tizón. El conjunto perico se ha enquistado en el decimosexto lugar. “La plantilla está tocada, era un partido contra un rival que no venía bien y le costaba ganar y teníamos esperanzas en darle la vuelta y colocarnos en una zona tranquila. Fue un palo porque era un encuentro que nos podía dar la tranquilidad para afrontar lo que queda con garantías”.
Aunque la plantilla está muy por debajo de su rendimiento y nivel, las críticas se centran en la gestión de Quique Sánchez Flores este curso. “No hemos hablado con él, al final también sufre por todo esto. Estamos todos en el mismo barco. Hay que intentar apoyarlo, estar todos juntos y seguir. Hemos llegado a esta situación por culpa nuestra, porque no hemos hecho las cosas bien durante el año. Sólo queda seguir todos juntos los cinco partidos que quedan”. No barruntan la destitución del técnico. “Ni nos lo planteamos. Nos quedan cinco partidos, tenemos que seguir. El fútbol nunca es todo matemático, pero la idea es seguir todos juntos, unidos: jugadores, cuerpo técnico y afición. Por suerte, los deméritos de los rivales hace que tengamos una ventaja. Hace dos año lo sacamos adelante y ahora con mejor equipo y más ventaja no hay nada que nos haga decir que no le daremos la vuelta”.
El técnico dijo en Getafe que “igual no damos para más” mientras que ante el Eibar soltó “cuando pudimos no quisimos y ahora que queremos no podemos”. Víctor Sánchez le resta importancia a estas señaleus al grupo. “No le damos importancia ni a lo que se diga fuera ni en rueda de prensa. Es momento para estar juntos, unidos, hablar dentro del campo y no fuera. No sirve para nada reprocharnos cosas. Ahora hay que ir juntos, sacar cada uno lo mejor. Estamos haciendo una temporada donde merecemos lo que estamos teniendo”. Y no encuentra el catalán un punto de inflexión a su más que posible salida en enero al Stoke. “La dinámica de la segunda vuelta ha sido complicada. A nivel de grupo la posible marcha de Quique en enero no es una cosa que afectó mucho porque es lógico que en este mundo haya ofertas, se estudien… El balance de la segunda vuelta es muy malo”, dijo.
El mediocentro blanquiazul, que regresó al equipo esta semana después de su sanción en Getafe, tiene claro que el Girona es un rival que le despierta muchas ganas. “Ojalá sea el rival propicio para que cada uno busque su amor propio, que lo tenemos muy herido este año. Nos ven como un enemigo, como un equipo a batir y, si nos pueden sacar 15 puntos, lo harán y, si nos pueden marcar cinco, también. Es otro equipo de Cataluña, ha venido para quedarse y está haciendo las cosas muy bien”. Un partido para respirar.
Unidad “Hemos llegado a esta situación por culpa nuestra”