Quiso llevar su filosofía al Calcio en su debut en Roma
■ Cuentan en Roma que Luis Enrique, cada día, se despertaba temprano y cruzaba toda la capital en bici, desde la zona de Olgiata, donde vivía, hasta la ciudad deportiva de Trigoria. Que era el primero en llegar y el último en irse: un ‘hombre vertical’ que exigía la misma disciplina para sus jugadores.
Dejó a De Rossi fuera de una convocatoria por un retraso en la reunión técnica, por ejemplo. Quiso llevar su filosofía al fútbol italiano: fe en el trabajo, juego ofensivo y de toque, confianza en la cantera. No le fue bien: su Roma cayó en el play-off de Europa League y cerró la Serie A en el séptimo puesto. Dijeron que era presumido, que no entendió el Calcio. Cuando ganó el triplete en Barcelona, la conclusión fue que fue el Calcio quien no entendió a Luis Enrique.